¿Qué hace que un barrio sea hermoso? ¿Es la elegancia objetiva de su arquitectura? ¿Es el verdor lo que añade naturaleza a un paisaje humano o es la cultura? ¿Quizás sean las historias del pasado las que lo hacen excepcionalmente memorable?
Los barrios más bonitos del país tienen una tajada de todo esto. Combinan pasado con presente, buena comida con gran arte y crean un rincón de la ciudad al que vale la pena volver.
10. Pueblo Alemán, Colón
El Pueblo Alemán tal como lo conocemos hoy se estableció en el corazón del siglo XIX y continúa mostrando el carácter, el encanto y la arquitectura de hace tantos años. Las calles bordeadas de ladrillos del Village dan paso a casas de ladrillo y escaparates que hacen que pasear por el vecindario sea un placer. Las calles Beck, Deshler y Mohawk son de visita obligada.
Abundan los deliciosos restaurantes, pastelerías y cafeterías, mientras que los parques locales son igualmente atractivos, al igual que la biblioteca Book Loft de 32 habitaciones. Después, visite el distrito cervecero vecino.
9.Georgetown, Washington
Georgetown, el barrio más antiguo de la ciudad capital del país, está lleno de encanto latente, sitios históricos, vistas panorámicas del río y mucha buena comida. Aquí también encontrará todas las compras que pueda realizar, desde boutiques hasta marcas conocidas.
Para experimentar su belleza, lleve a la tripulación al paseo marítimo de Georgetown y al río Potomac, donde podrá navegar en kayak disfrutando del horizonte de DC o vivirlo en un barco ciclista BYOB. Una vez completado, deje que su paladar disfrute en el puerto de Washington, que está repleto de restaurantes galardonados.
Para disfrutar más de la naturaleza, explore Dumbarton Oaks y pasee por Tudor Place.
8. Playa Sur, Miami Beach
Cuando la gente dice que van a Miami, a menudo se refieren específicamente a South Beach. El vecindario personifica lo que hace funcionar a Miami. Y es más que interminables playas de arena blanca y mares turquesas.
Durante el día puedes experimentar la mayor concentración de arquitectura art déco en la faz de la tierra. Estos incluyen hoteles antiguos con historias fluyendo por sus poros hasta edificios históricos que muestran el auge de Miami en la primera mitad del siglo XX.
Sin embargo, lo que le traerá de vuelta al presente son los pintorescos senderos de la playa, los patinadores fluorescentes y los aficionados al gimnasio. La gente siempre sale a disfrutar de la belleza de South Beach. Así que no se sentirá culpable cuando llegue el momento de pedir otro cóctel después del anochecer.
7. Sobre el Rin, Cincinnati
Over-The-Rhine, el principal barrio de Cincinnati, es un centro de actividad cultural, eventos, compras, abundante cerveza y edificios atractivos. El barrio conserva las historias del pasado, desde la inmigración alemana/italiana hasta el flujo de gente hacia el oeste, en sus memorables murales, museos y arquitectura. Estos brindan contexto al espacio mientras disfruta de la deliciosa escena culinaria de OTR.
Los tranvías gratuitos le ayudarán a llegar desde Northern Row Brewery hasta Washington Park e incluso hasta The Banks si desea echar un vistazo a Kentucky. En el camino, haga una parada en el antiguo mercado público de la ciudad, Findlay Market, y asista a un espectáculo en el Cincinnati Music Hall.
6. Extremo norte, Boston
Hay mucha belleza en el North End de Boston, desde su hilera de restaurantes italianos con iluminación cálida hasta la Old North Church. Sin embargo, es la importancia histórica, desde la llegada de los puritanos hasta los bares y la revolución, lo que la convierte en una visita tan maravillosa.
El Freedom Trail de Boston finalmente atraviesa el North End antes de llegar al infame Bunker Hill. En el camino, encontrará la casa de Paul Revere, Faneuil Hall y el cementerio de Copp’s Hill.
Al igual que cuando los puritanos se extendieron al resto de la ciudad, la población de North End ha sido reemplazada constantemente por comunidades de inmigrantes, desde irlandeses hasta alemanes e italianos, creando un tapiz cultural y joyas culinarias únicos.
5. La Jolla, San Diego
La joya junto al mar, La Jolla, tiene una combinación memorable de belleza natural, playas espectaculares y una encantadora atmósfera de pueblo. La espectacular costa, una joya a lo largo de la gran costa oeste, hace de La Jolla un popular destino de playa. De hecho, la ciudad está rodeada por mares infinitos por tres lados.
Eso crea un escenario increíble, pero exploremos el vecindario propiamente dicho. Exclusivos y a menudo lujosos, encontrará boutiques únicas, restaurantes de primer nivel, fantásticas galerías de arte y museos, sin mencionar algunos de los principales campos de golf del país. Todas cuentan con vistas a la impresionante costa.
4. Barrio Francés, Nueva Orleans
Hoy en día, el Barrio Francés puede ser más famoso por sus cócteles huracanados, sus borrachos con Bourbon y su Mardi Gras, pero lo que se esconde detrás de esa farsa es un distrito más que hermoso. El estilo y el espíritu comunitario hacen de Nueva Orleans una parte especial y única de la sociedad estadounidense, pero en el Barrio Francés todos podemos hacer un viaje a los primeros años del país.
El barrio se estableció inicialmente como una red militar y el distrito alberga historias de la ocupación española, francesa, inglesa y estadounidense. Sin mencionar la llegada de los acadianos (cajunes) del Gran Norte Blanco. Todo se mezcla en un lugar cultural y gastronómico incomparable donde la impresionante arquitectura está igualmente embrujada. Los recorridos de fantasmas son tan necesarios como los buñuelos.
3. Greenwich Village, Nueva York
Con el distrito financiero al fondo con sus relucientes rascacielos, Greenwich Village sigue siendo un distrito histórico inquebrantable. Una vez declarada república independiente (¡lo sé!) y lugar frecuentado por Jack Kerouac, beatniks y bohemios, Greenwich tiene una vibra en sí misma.
Esta joya del bajo Manhattan es ahora uno de los barrios más caros de la ciudad, ya sabes, porque cultura, cultura, cultura. Claro, es posible que no podamos vivir aquí, pero caminar es un verdadero placer. Piedra, ladrillos y hierro forjado se mezclan para crear hileras de elegantes apartamentos, mientras que los árboles y el asfalto se convierten en uno.
Su herencia artística, literaria y activista continúa en galerías de contracultura y lugares de moda como el Stonewall Inn.
2. Alturas del Pacífico, San Francisco
Sofisticación, mansiones y vistas panorámicas es lo que los viajeros deben esperar al llegar a Pacific Heights de San Francisco. Este barrio, que se eleva sobre el Océano Pacífico, es un lugar privilegiado para fotografiar la Bahía, el infame Alcatraz y el Puente Golden Gate.
Pacific Heights personifica la belleza del vecindario a lo largo de sus hileras de hermosas casas, donde uno puede simplemente pasear y admirar lo que hay a ambos lados. Para conocer las casas más gigantescas, visite las calles Baker y Clay. Más tarde, come por Filmore Street, admira los escalones de Lyon Street (camina por ellos si todavía tienes energía) antes de desplomarte con un croissant b.patisserie en Alta Plaza Park.
1. Distrito histórico de Savannah
El encanto de Savannah es siempre evidente en su distrito histórico. Sin haber perdido nada de su antiguo ambiente colonial, las calles adoquinadas y los edificios antiguos son más europeos que americanos. Eso es hasta que los jardines de robles y el musgo español te recuerdan que sí, que estás explorando Low Country.
El Distrito Histórico Nacional está repleto de museos, fuertes y cementerios espeluznantes que preservan el pasado y el aparente presente embrujado de la ciudad. ¿Alguien quiere Halloween?
Pero es la atmósfera del distrito histórico, las vibraciones divertidas y la cultura gastronómica lo que lo convierte en un destino tan popular. Ven y descubre festivales, arte y teatro, cocina Low Country y excelente clima.
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