¿Te falta motivación para ponerte en forma? ¿No tienes tiempo de ir al gimnasio? Te damos 10 motivos y unos consejos muy ùtiles con los que empezarás hoy mismo a incorporar el deporte a tu día a día. Verás qué diferencia!
1. Reservarte un rato para hacer ejercicio te dará el espacio perfecto para desconectar de tus obligaciones diarias y distraerte de preocupaciones y demás rutinas del día a día.
2. Cuando practicamos deporte segregamos endorfinas, también presentes en el chocolate y en el sexo, que nos aportan sensación de bienestar.
3. En relativamente poco tiempo, notarás tu cuerpo más estilizado y tonificado y esto le sube la autoestima a cualquiera.
4. Mejorará el estado de tu piel, y verás como tienes mejor cara!
5. Corregirás y mejorarás tu postura, despidiéndote de los típicos dolores de cervicales y espalda.
6. Te sentirás más ágil y activa, y créeme esto rejuvenece muchísimo más que la mejor de las cremas antiarrugas.
7. Te ayudará a librarte de gran parte del estrés, desahogarte si tienes un mal día, y a sentirte mejor contigo misma.
8. Poco a poco, podrás ir modelando aquellas zonas más rebeldes de tu cuerpo, definirás, perderás grasa y podrás decirle adiós a esos kilos de más.
9. Adquirirás más resistencia y notarás como te cansas mucho menos.
10. Progresivamente y casi sin darte cuenta, acabarás llevando una dieta mucho más saludable y equilibrada.
Lo mejor de todo es que para estar en forma no tienes ni que pisar el gimnasio si no quieres. Puedes hacer ejercicio en casa sin tener que comprarte absolutamente nada, ni siquiera unas deportivas, sólo necesitarás calcetines y un pantalón de deporte, unas mallas o leggins.
Opcionalmente, puedes comprarte una esterilla de yoga o similar, siempre viene bien, sobretodo si no tienes suelo de madera en casa, pero no es indispensable.
Pero, antes de marearos con ejercicios, empecemos por lo más básico: si te dijera que, sólo cambiando un par de hábitos empezarías a ver resultados a los pocos días, me creerías?- Olvídate de que tienes ascensor en casa, siempre que puedas, sube por las escaleras.
- Si el tiempo te lo permite y no vas a llegar tarde, bájate una parada antes del metro o del bus.
- Ve andando o en bicicleta siempre que puedas y, si tienes perro, alarga sus paseos 10 minutos más, él te lo agradecerá un montón y tu lo notarás en tus piernas.
En el próximo post comentamos los resultados y empezamos con los ejercicios, siempre comenzando por lo más básico para más adelante, cuando ya tengas más fondo, ir aumentando la dificultad.
¿Te apuntas al reto?
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