10 productos que no te pueden faltar cuando nazca tu hijo

Cuando nos enteramos de que estaba embarazada de mi primer hijo Adrián, hace ya 11 años, y después del primer alegrón y los primeros saltos de felicidad, llegó el momento "¡Dios mío! cómo se cuida a un niño!!!???". Tranquila, dura poco, es el típico miedito ante lo desconocido.

Es curioso descubrir a lo largo de 9 meses que todo el mundo siempre sabe más que tu sobre cómo criar a un hijo ¡hasta quien no ha tenido ninguno tiene algo que opinar al respecto!! No te preocupes, es normal, es cosa de la raza humana querer opinar siempre sobre todo. Pero si aceptas un humilde consejo, no te sientas mal por ello, quien va a tener un hijo eres tú, y nadie, repito NADIE, sabrá mejor que tú lo que necesita tu hij@. Ese instinto del que todo el mundo habla realmente existe y cuando coges por primera vez a tu bebé, sentirás que siempre ha estado contigo, y ya no te acordarás cómo era tu vida antes de que llegara. Así que deja que la gente opine y hable y luego haces lo que te dé la real gana.

Pero reconozco que había consejos que siempre venían bien. Y bajo esa idea me atrevo a escribir hoy este post. Me gustaría contarte los 10 accesorios de puericultura que mejor y peor me vinieron a mi, pero, repito, no tiene porque ser lo mismo para ti.

1.- SILLA DE PASEO

Este es el número 1. Yo creo que antes de quedarnos embarazadas, todas sabemos el tipo de carrito que vamos a querer llevar. Yo también lo tenía muy claro. Y antes no había tanta variedad como ahora. Dentro de tus preferencias, oye opiniones y consejos de otras madres, porque es muy importante este tema, ya que depende mucho del coche que tengas (no es lo mismo un panda que un Monovolumen), de dónde vivas (si vives en un 2º sin ascensor - como nosotros - te digo que es muy importante saber qué vas a hacer con el carro cuando llegues a casa), de la ciudad donde vivas (si! también es importante si vives en un pueblo de montaña con cuestas y piedras o en una ciudad todo llano)... en fin, muchísimos puntos que tienes que mirar. Para mi, pero es solo mi opinión, el mejor carro era el Bugaboo, de hecho, es el que compré con mi segunda hija. Después hasta lo pude revender porque quedó nuevo. No como el que usó Adrián, un Jané que quedó para tirarlo a la basura.

2.- CUNA

Aquí ya, según gustos. Yo empecé con un cuco de mimbre para Adrián, muy cómodo para tenerlo al lado de la cama, pero reconozco que si lo hubiera tenido que comprar no lo hubiera hecho, porque te dura escasamente un mes. Después el niño no cabe o se mueve tanto que es un peligro.

Con Alejandra usé una minicuna, más cómoda y algo más duradera que el cuco. Pero a los 3 meses más o menos la tuve que pasar a la cuna.

Otro tema es la cuna de viaje. Si te mueves mucho, ni te lo pienses, te hará falta. Muy cómodas de montar y transportar. Incluso si tienes que dejar al niño en casa de los abuelos, lo más cómodo es montarles la cuna de viaje.

3.- SILLA PARA EL COCHE.

Aquí no me voy a enrollar, te remito a un post que escribí hace un par de semanas sobre este tema, porque con la cantidad de tipos y grupos no merece la pena volver a enrollarme. Aquí tienes toda la información que te puedo dar sobre este tema: SILLAS DE RETENCIÓN PARA EL COCHE: Esa gran locura de grupos y tipos

4.- TRONA

Esto no es muy urgente tenerlo para cuando nazca, pero sí he de decir que me vino muy bien cuando empezaron a comer papilla, era más cómodo para ellos y para mi que estuvieran sentados y ¡sujetos! Pero lo que fue un descubrimiento con Alejandra fue el Bumbo:

5.- HAMACA

Con Adrián no usé ninguna hamaca, tenía tiempo suficiente para tenerle en brazos. Pero cuando se tiene el segundo, o el tercero... ¿dónde dejas al niño cuando tienes que atender al mayor? Así que me vino muy bien tener una hamaca en la que dejar a la pequeña. Reconozco que fue útil.

6.- BAÑERA

Aún recuerdo los viajes a Madrid desde León con Adrián de bebé... el maletero del coche era como un puzzle en el que todas las piezas tenían que encajar perfectamente o no cerraba el maletero. Y uno de los trastos con los que nos movíamos era la bañera. En casa usamos una que nos regalaron, que era un mueble muy chulo, al que después le dimos mucho uso como almacenaje de juguetes. Y aunque era muy cómodo para bañar al niño, en poco tiempo la dejamos de usar porque la habitación acababa como el titanic cuando estaba hundiéndose.

Así que le bañábamos en la bañera de toda la vida, dentro nuestra misma bañera.

Incluso llegamos a sustituir esta bañera para los viajes por una hinchable que no me acuerdo dónde encontré. La usamos poco, era muy pequeña, pero nos hizo su servicio:

Pero en estos años han salido muchas ideas para la hora del baño. Mi consejo es que no te aturulles, en cuanto tu hijo se mantenga sentado no te va a quedar otra que meterle en la bañera y estar con él jugando con el agua, así que todo lo que hayas comprado lo dejarás de usar.

7.- PARQUE

Esto es algo que nunca le vi utilidad, nada más que como trasto en el salón donde acababan todos los juguetes y el niño fuera. Nos dejaron uno cuando Alejandra tenía unos meses, pero no creo que lo tuviéramos más de dos meses en casa. De hecho con Adrián pasamos perfectamente sin el parque.

8.- ROBOT DE COCINA

Aquí puede haber opiniones para todos los gustos, y más cuando existen en el mercado tantos robots tipo Thermomix, para cocinar. Yo tenía la Thermomix, pero, o hacía purés para dos meses, o no me merecía la pena hacerlo ahí. Así que usaba la batidora. Pero descubrí la BabyCook y me la compré. Ha sido el cacharro de cocina que más he amortizado, más incluso que la Thermomix. La usaba para los purés y las papillas de frutas, cocina al vapor y tritura, y dejaba los purés super suaves. Incluso descubrí cómo hacer compotas de frutas, que mi hijo se las comía muchísimo más a gusto que las frutas trituradas sin más.

Como es pequeña y manejable me la llevaba hasta cuando salíamos de vacaciones. De todo lo que os cuento aquí, si tengo que recomendar algo, recomiendo esto sin duda.

9.- ORINAL

Aun no sé porqué nos empeñamos en comprarles orinales con música, colores y fiestas varias a los niños... Ellos no quieren sentarse en el orinal!!! Con Adrián compramos uno que se suponía sonaba música cuando hacía pipí, y digo se supone porque creo que nunca llegamos a escucharla. Dinero tirado a la basura. Acabamos usando el orinal de taburete para llegar al lavabo.

También compramos el típico orinal... bueno, alguna vez se usó, sentaba a Adrián delante de la tele y ahí se tiraba un rato, como quien está sentado en una silla....

Al final, lo que mejor nos vino fue el reductor WC, tanto Alejandra como Adrián aprendieron a hacer pipí directamente en la taza del water.

10.- CALIENTABIBERONES Y ESTIRILIZADOR

El tema de los biberones y el pecho lo voy a dejar para otro post, es mención a parte, porque he probado las dos cosas y da para largo mi opinión.

Al calientabiberones yo le saqué mucho partido, porque con Alejandra me vino muy bien para las noches. Dejaba el biberón preparado con el agua calentita y sólo tenía que echarle los polvos para dárselo. Así que era muy cómodo.

Y el estirilizador sólo lo usé con la pequeña, porque usé más biberones que con Adrián y me era más cómodo que esterilizarlos en la olla con agua hirviendo. Los metía a todos en el aparato y en media hora los tenía limpitos. Me solucionó bastante, la verdad.

Y hasta aquí mi lista. Seguro que echas en falta muchas cosas, hay miles!!! pero entonces estaría aquí un buen rato!.

Si quieres mi opinión sobre algo en concreto no dudes en preguntarme que te responderé encantada. Me imagino que tendrás muchas dudas, es normal, pero no te agobies, todo tiene que fluir con normalidad! Es una etapa preciosa que debes disfrutar sin agobios porque se pasa muy rápido y no merece la pena estar preocupada por estas cosas. Tu sólo disfruta de tu bebé!

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