Aun es un poco pronto para pensar en el verano, pero no lo es tanto para comenzar a organizar las actividades para los tres meses de vacaciones que tienen los más pequeños. Ahora es el mejor momento para encontrar ofertas y planes a la medida y, de hecho, de poder seleccionar aquellos más adecuados para que el niño aprenda y se divierta.
Una de las actividades típicas del verano son los campamentos, que proponen actividades de ocio, tiempo libre, aprendizaje y compañerismo en un entorno natural, son un clásico, sí, pero precisamente por ello, una apuesta segura. ¿Por qué llevar a los niños a campamentos de verano?
10 ventajas de los campamentos de verano
- La normativa dice que siempre estarán vigilados por profesionales con experiencia.
- Aprenden a respetar la naturaleza.
- Se hacen independientes y aprenden a valerse por sí mismos.
- Refuerzan el valor del compañerismo, muy importante para todos los niños, pero sobre todo, para hijos únicos.
- Descubren el deporte desde un punto de vista divertido.
- Aprenden sobre cultura, curiosidades…
- Repasan de forma práctica algunos de los conceptos que estudian durante el curso escolar.
- Mejorar la seguridad en sí mismo.
- Aprenden a respetar a otras personas.
- Mejorar el aprecio de aquello que tienen cerca: su familia y amigos, las comodidades, su hogar…
Algunos niños son reacios a ir de campamento, por miedo a estar sin sus padres o por miedo a lo desconocido, pero después de un primer año, seguro que la experiencia les gusta tanto que no dudarán en repetir.