Un hiperónimo es una palabra cuyo significado está incluido en el de otras a las que llamamos hipónimos. En los siguientes ejemplos el hiperónimo aparece en negrita y los hipónimos en cursiva.
Pájaro (ruiseñor, gorrión, verderón)
Flor (margarita, rosa, petunia)
Barco (fragata, destructor, petrolero)
Perro (lebrel, mastín, caniche)
Insecto (hormiga, araña, mosca)
Libro (diccionario, manual, cuaderno)
Escritor (traductor, ensayista, novelista)
Automóvil (coche, turismo, camioneta)
Mamíferos (ser humano, oso, gato)
Prensa (diario, revista, panfleto)
Mes (enero, marzo, julio)
Familia (cuñado, hijo, abuelo)
Fruta (plátano, manzana, fresa)
Dedo (pulgar, índice, meñique)
Cítrico (naranja, limón, mandarina)
Herramienta (martillo, alicate, llave inglesa)
Baile (rock and roll, salsa, tango)
Cubierto (tenedor, cuchillo, cuchara)
Color (verde, azul, rojo)
Cánido (chacal, lobo, zorro)
Hogar (casa, vivienda, choza)
Verdura (lechuga, cebolla, berenjena)
Tubérculo (patata, boniato, chufa)
Legumbre (lentejas, guisantes, judías)
Letra (alfa, delta, efe)
Vía (calle, callejón, avenida)
Combustible (gasolina, diésel, petróleo)
Espada (katana, estoque, alfanje)
Cereal (trigo, cebada, avena)
Número (cardinal, ordinal, cinco)
Mueble (mesa, sillón, silla)