Y es que 100 razones para amar los tebeos son pocas…
1. Porque siempre que veo una caseta de perro me apetece subirme al techo y echarme a divagar
2. Por el movimiento continuo que me hipnotiza en el Travel de Yokoyama
3. Porque sigo ensuciándome las manos en cualquier librería de viejo buscando tebeos.
4. Porque he descubierto que el tebeo está más allá de un papel o de la pantalla brillante de un iPad.
5. Porque me gusta soñar y tener pesadillas en Unifactor.
6. Porque a mi hijo le encanta La caca mágica de Sergio Mora.
7. Porque la única regla que tiene la historieta es romper las reglas.
8. Por reivindicar a Howard Chaykin como uno de los grandes renovadores del cómic adulto con American Flagg.
9. Por seguir riéndome de la mala hostia del susodicho en Black Kiss.
10. Porque cada día descubro que lo nuevo ya fue descubierto hace 100 años.
11. Por Vázquez. ¡Qué coño!
12. Porque Coll me sigue pareciendo el culmen de la elegancia moderna.
13. Por la rabiosa modernidad de Mihura.
14. Porque Ware sigue investigando nuevos recovecos en lo que otros habían intuido.
15. Porque llega un día y descubro que Naughty Pete es puro delirio gráfico.
16. Porque quiero que Fletcher Hanks destruya el universo conocido.
17. Por la maravillosa genialidad de Calpurnio y su Cuttlas.
18. Porque Felipe Almendros siga contando sus neuras.
19. Porque siempre me enamoro de las chicas que dibuja Ana Miralles.
20. Porque me gustaría encontrarme en un bar perdido de barrio con el Capitán Torrezno.
21. Porque los tebeos siguen oliendo.
22. Porque me sigo emocionando cuando veo muchos tebeos juntos.
23. Porque un día piensas que ya no se innova en los tebeos y al día siguiente llegan los de Ultrarradio.
24. Por la fuerza de los dibujos de David Rubín.
25. Porque Los Garriris siguen teniendo descaro y sentido.
26. Por la Estrella Lejana de Torres.
27. Por la historieta de los nabucodonosorcitos homenajeando a Coll en el Raya de Micharmut
28. Por Peter Maresca y sus carísimas ediciones gigantes
29. Por la terca y maravillosa inconsciencia de Manuel Caldas
30. Porque quiero ir a La Patagonia que dibuja Jorge González.
31. Porque una de las mejores novelas negras que se ha escrito jamás la protagoniza Mickey Mouse
32. Por la escena del espejo en la cómoda con que se inicia el Lost Girls de Moore y Gebbie
33. Por meterme con Frank Miller.
34. Por la palabra de Dios reescrita por Robert Crumb
35. Porque la Valentina de Crepax sigue siendo un catálogo de vanguardias narrativas
36. Porque Valentina es la reencarnación más bella de Louise Brooks
37. Porque la mejor historia de zombies que se ha escrito es Los pitufos negros
38. Porque Dave Sim está algo chalado.
39. Porque Mazzucchelli sigue fiel al espíritu de Rubber Blanket
40. Porque siempre encontraré tebeos que no he leído.
41. Porque Shigeru Mizuki me llenó de ilusión con NonNonBa y de espanto con Operación Muerte
42. Porque Milligan es capaz de lo mejor y de lo peor.
43. Porque los superhéroes pueden todavía ser interesantes como demostró X-Statix
44. Por las monstruosas ediciones de los DC Showcase
45. Porque me lo sigo pasando bomba con los delirios del Batman de Sprang o Moldoff
46. Porque soy capaz de comprarme cualquier edición de Krazy Kat.
47. Porque Krazy Kat me da 1000 razones para amar los tebeos.
48. Por ese maravilloso oeste retro de Gus.
49. Porque sigo sintiendo el golpe en el pecho cada vez que el Thor de Kirby estampa su Mjolnir.
50. Por la deliciosa ingenuidad verdosa de Yotsuba
51. Por Sempé.
52. Por la elegancia e inteligencia de los tebeos de Jules Feiffer.
53. Porque Manel Fontedvila es un puñetero genio.
54. Por la poesía gráfica de Edmond Baudoin
55. Por la vitalidad gestual de Bastien Vivés
56. Por los colores hipnóticos del Peter Petrake de Calatayud.
57. Por el buen humor de Ramón Boldú
58. Por lo mal que lo paso leyendo los tebeos de Hideshi Hino
59. Por la larga caída de El arte de volar.
60. Por Paco Roca
61. Por las discusiones sobre tebeos de los viernes por la tarde
62. Por las fotos inexistentes de Julius Knipl.
63. Porque Koma es una fábula moderna perfecta.
64. Por la inquietante lucidez de las viñetas de Miguel Brieva.
65. Porque Silvio José es mejor que Ignatius J. Reilly.
66. Porque los fanzines siguen rompiendo moldes
67. Por que Sonia y Pere consiguieran que me gustaran los caracoles, por lo menos en papel
68. Porque lees un tebeo de Nacho Casanova y parece como si te estuvieras tomando una caña con él.
69. Porque un día aparece Nobrow
70. Porque los árboles de Miguel B. Núñez tienen corazón
71. Porque me gusta emborracharme de Sfar.
72. Por el Spirou Año Uno de Emile Bravo.
73. Porque Moebius se atrevió a meterse dentro de sí mismo.
74. Por la voluptuosidad de Dave Cooper
75. Porque van a reeditar por fin el Barnaby de Crockett Jhonson
76. Porque Obélix y Cia. debería ser lectura obligada para todos estos gurus de la crisis
77. Porque nos hace falta que nos salve Pravda la survireuse.
78. Porque no se ha vuelta a superar la locura de Saga de Xam.
79. Porque cuando espero el bus siempre pienso en Paul Kirchner.
80. Porque Carlos Giménez me sigue emocionando cuando cuenta historias.
81. Por la limpieza de trazo de Mort Meskin.
82. Por Franquin, siempre por Franquin, ya sea en ideas oscuras o en gastonadas.
83. Porque Fred lo inventó casi todo.
84. Porque Otto Soglow nunca estará suficientemente reconocido.
85. Por los culebrones de Palomar.
86. Por educar a Hopey Glass.
87. Por llorar cada vez que leo El olmo del Cáucaso
88. Por Astroboy
89. Por la lenguaraz sinceridad de Aurelia Aurita.
90. Porque ha vuelto Claire Bretecher.
91. Por el genial absurdo de adaptar un musical indefinible como Starstruck al tebeo
92. Porque los vivos de los muertos vivientes de Kirkman dan miedo
93. Porque no puedo esperar a leer la siguiente entrega de Scalped.
94. Porque Keko sigue poniéndome los pelos como escarpias cuando explora la psique humana.
95. Porque cava me sigue retando en sus historias.
96. Por la Eli, la secretaria personal de Álvarez Rabo
97. Por Dios en persona. El de Mathieu, claro.
98. Por ver a través de los ojos del gato.
99. Por el destino ineludible del artista según Campbell.
100. Porque puedo escribir 100 razones más todavía. Y 100, y 100, y 100…