
Sheet Music es un disco de pop art afilado: compacto, juguetón y despiadadamente bien producido, donde 10cc convierten la melodía instantánea en un laboratorio de arreglos y humor negro; temas como “The Wall Street shuffle” o “Silly love” muestran el pulso pop inmediato, mientras cortes como “Clockwork creep” u “Oh effendi” meten giros dramáticos y narrativos que delatan cabeza prog y gusto por la parodia; la grabación en sus Strawberry Studios y la complicidad creativa de Stewart, Gouldman, Godley y Creme permiten una alternancia constante de estilos y voces, a veces como veteranos del estudio, otras veces como niños traviesos, y el resultado es un álbum que suena tan impecable técnicamente como irreverente en el fondo; no es sólo una colección de singles: es una pequeña enciclopedia de juegos compositivos, con letras satíricas y construcciones vocales que luego definirían el sello del grupo; en la discografía de 10cc queda como su punto de mayor ambición conjunta antes de las rupturas, un segundo largo que consolidó su perfil comercial (entró en el Top 10 británico) y su reputación crítica: entretenido, exigente y muy recomendable para quien quiera entender cómo el pop puede ser inteligente sin perder gancho.
