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Hace unos días el Gobierno anunció que desde el 7 de marzo rebajaría temporalmente el límite máximo de velocidad en autovías y autopistas de 120 Km/h a 110 Km/h con motivo del alza del precio del petróleo para intentar así disminuir el consumo de carburante.
Ni que decir tiene que cuando nos enteramos de la noticia el que más y el que menos pensó que la cosa no dejaba de ser otra treta más para seguir crujiéndonos a multas, aunque Rubalcaba diga lo contrario.
Pese a todo el Ejecutivo por una vez ha pulsado la opinión de los ciudadanos y ya barajan distintos tipos de señalización según el tipo de mosqueo del conductor de turno.
En primer lugar os presento el modelo "Yo me lo paso por el forro", para aquellos que tienen pensado saltarse a la torera el nuevo límite de velocidad.

En segundo lugar tenemos la señalización adecuada a aquellos a los que la medida les ha sentado "Como una patada en los huevos".

Y para finalizar está el modelo "Mecagüen...", para aquellos que se acuerden de la progenitora de aquel al que se le ocurrió la idea de rebajar la velocidad máxima, para los que se caguen en las revueltas de los países musulmanes que derivan en subidas del crudo, o para los que ya tienen por norma cagarse en Zapatero.