Una vez más se acerca el comienzo de un nuevo año. Y, aunque soy de las que opinan que cualquier momento es bueno para replantearse objetivos, metas, sueños, deseos, …estas fechas se convierten para muchos en un punto de inflexión en el que se replantean si están llevando a cabo la vida que desean.
Si es tu caso, no dejes pasar otro año más si clarificar lo que deseas de verdad. No te lo puedes permitir, el tiempo pasa….
Por esto, he querido compartir contigo este artículo en el que deseo acompañarte para que pongas nombre a tus sueños, localices tus frenos, los superes y consigas diseñar tu día a día ideal, ese que deseas.
Pero, vayamos paso a paso.
Primero es importante que pienses en aquello que te gustaría lograr. ¿Qué sería eso que te hiciera realmente feliz?
Para ello te planteo un ejercicio:
Se trata de que dibujes un círculo y lo dividas en esas áreas que son importantes en tu vida, por ejemplo: Familia, Economía, Amigos, Salud, Desarrollo personal, Trabajo, Hobbies.
No han de ser estas que te planteo, dependerá de ti el como configures tu círculo y el nombre que pongas a cada “quesito”.
Una vez lo tengas realizado has de poner una puntuación a cada área, dependiendo del grado de satisfacción que tengas en ese aspecto de tu vida.
Este es un primer paso para que, desde un nivel consciente, veas plasmado en el papel cómo estás valorando tu vida es sus distintas áreas.
Tras analizar este ejercicio, en aquellas áreas a las que menos puntuación hallas dado plantéate que te gustaría conseguir en ellas y que haría que las puntuaras con mayor puntuación. ¿Qué puedes hacer tú para que sea así?
De las tres áreas con menor puntuación has de plantearte un objetivo y apuntarlo.
Esta es una forma para que este año te plantees objetivos que estén acordes realmente con lo que deseas y no con lo que los demás te dicen que tienes que hacer o con lo que la sociedad te marca para que lleves a cabo.
Este es un ejercicio que tiene más pasos, que yo hace poco lleve a cabo de la mano de mi Coach Pilar Fernández y que para mi ha resultado ser todo un descubrimiento, ya que, aunque tengo mis objetivos claros no sabía de donde partían los frenos que no me dejan ir más allá.
Aún así, a pesar de que en este artículo te comparto únicamente el primer paso es una buena manera para que este año de veras de plantees objetivos afines a tus deseos reales.
Ahora bien, es importante que identifiques tus frenos.
Para ello, piensa qué suele ser lo que no te deja avanzar: las opiniones de los demás, el miedo, el conformismo, la creencia de que algo no está hecho para ti…
Y actúa para que no limite más tus deseos, pero ¿cómo? Actuando, siendo consciente de que el tiempo pasa y de que si no actúas ahora nunca lograrás lo que deseas. Que la comodidad que ahora sientes por no enfrentarte a tus frenos sólo te va a reportar frustración.
Así que decide si prefieres esta comodidad aparente o prefieres vivir una vida plena.
Cuando localices tus frenos plantéate en qué momento de tu vida has tenido que hacerles frente y qué resultados has obtenido al hacerlo.
Aquí puedes dibujar una línea y marcar en ella todos tus logros, todo aquello que has logrado gracias a tu esfuerzo y constancia. De esta manera te darás cuenta de que tienes recursos que ya has utilizado y que en este momento puedes recuperar para estos nuevos objetivos que te has marcado.
No tengas prisa en realizar estos ejercicios, tómate tu tiempo, medítalo bien, ya que de ellos va a partir lo que a partir de ahora hagas. Pero, si de veras deseas un cambio en tu vida, hazlo.
Una vez tengas tus objetivos definidos es importante que seas muy constante para lograrlos, que confíes en ti mismo y que asumas la responsabilidad de tu vida.
Por último, márcate una fecha para la consecución de tus objetivos, que sea realista, pero que te empuje a estar en acción desde el primer momento. Y decide que pasos intermedios tendrás que dar para lograr esos objetivos que te has marcado.
Ten tus objetivos presentes y haz algo cada día para lograrlos.
Para finalizar, te diré que es mejor tener uno o dos objetivos bien planteados que diez. Resulta más sencillo y más recomendable que tengas en mente pocos objetivos para que, de esta manera, tu energía se centre en una o dos metas.
Si deseas que te acompañe con la clarificación de tus objetivos, con la eliminación de tus frenos y con el plan de acción que te conduzca hacia la vida que deseas, más abajo encuentras el enlace para acceder a mis servicios.
A continuación te comparto la Metáfora del Elefante de Jorge Bucay. Te recomiendo que accedas a ella, ya que puede hacer que te replantees ciertas cuestiones. Para ello, da al Play.