Escudo de Móstoles.
El dos de mayo de 1808 multitud de madrileños se reunieron en las cercanías del Palacio Real de Madrid, ocupado por tropas napoleónicas.
Cuando los franceses procedían a introducir al infante Fernando en un coche de caballos para trasladarlo a Francia, el gentío que allí se encontraba comenzó a gritar la famosa frase “¡QUE NOS LOS LLEVAN!”. Fue entonces cuando los madrileños allí presentes se lanzaron contra la columna francesa, en un intento de evitar lo inevitable. En aquel preciso instante se comenzó a derramar la sangre de los primeros mártires de la guerra, los soldados franceses dispararon sin piedad contra los civiles que se lanzaron a los coches.
Más tarde, Andrés Torrejón y Simón Hernández, alcaldes de la ciudad de Móstoles publicaron un bando municipal que decía tal que así:
Imagen del bando original.
"Es notorio que los franceses apostados a las cercanías de Madrid y dentro de la Corte, han tomado la defensa sobre este pueblo capital, y las tropas españolas; pro manera, que en Madrid está corriendo a esas horas mucha sangre; como Españoles es necesario que muramos por el Rey y por la Patria, armándonos contra unos pérfidos que, socolor de la amistad y alianza nos quieren imponer un pesado yugo, después de haberse apoderado de la Augusta persona del Rey; procedamos pues, a tomar las activas providencias para escarmentar tanta perfidia, acudiendo al socorro de Madrid y demás pueblos y alentándonos, pues no hay fuerzas que prevalezcan contra quien es leal y valiente, como los Españoles lo son".De esta forma la localidad de Móstoles declaraba la guerra al invasor francés, un pueblo que inició la movilización de todo un país.
Y esta “declaración de guerra” podríamos decir que se ha mantenido hasta 1985, cuando el ayuntamiento de Móstoles firmó la paz con el “enemigo”, en un acto al que acudió el embajador francés.