191.- Cuando la mentira es democracia

Ayer me dio por ver las portadas de los periódicos y algunos telediarios de diferentes emisoras, por aquello de ver cómo enfocaban el 19-J. Más allá del asco que me dio ABC, que ni siquiera hacía referencia a las movilizaciones en su portada (algo que por otro lado tampoco me sorprende), es increíble lo que se puede llegar a decir. En la edición digital de El País me encontraba con esta foto que da idea de lo preocupados que están los lacayos del capital con el bienestar de los ciudadanos. En el marco de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros (la mejor forma de no decir nada al no tener que responder a nada), la cerdita Peggy (uy, perdón, Soraya Sáenz de Santamaría), flanqueada por el señor Burns (Cristóbal Montoro) y la madrastra de Blancanieves (Ana Pastor), tenía la caradura de decir algo como que “tenemos la legitimidad de la ciudadanía para hacer las reformas estructurales necesarias…”. Bueno, ya sabéis, la frase no es literal, pero responde al neohabla pepero del “donde dije digo digo Diego”, sin que se pongan ni coloraos. Lo que se le olvidó decir es que cuando las votaciones, dijeron exactamente lo contrario de lo que están haciendo. ¿Es eso la democracia, esa gran palabra que no se les cae de la boca mientras nos machacan? Pues en realidad, no veo gran diferencia con la dictadura. Usted diga lo que quiera que yo haré lo que me dé la gana, aunque antes dijera lo contrario, como dijo Rajoy sin siquera turbarse un poquito. Eso sí, como ya os he contado, se les nota la cara de preocupación por los perjuicios que puedan causar a los ciudadanos. ¿No os lo creéis? pues ahí tenéis la prueba.

¿Véis lo preocupados que estaban mientras nos apretaban otra vez las tuercas?
Claro que al menos está la mente suprema de Andrea Fabra, que me hace eliminar todas las dudas que tenía sobre seguir votando al PP. Gracias, Andrea….