Las jornadas de fin de semana de la Mostra de Cinema
Italiano de Barcelona son una marathon de proyecciones. Para el sábado 13 de
diciembre estaban programadas las cintas Gioia Mia de Margherita
Spampinato, La Gioia de Nicolangelo Gelomini y La Valle dei sorrisi
(La sonrisa de mal) de Paolo Strippoli
La actriz Aurora Quattrocchi con casi 40 años de trayectoria cautivó al público de la MCIB con su vitalidad y simpatía. Si el director de cine Alfred Hitchcock afirmó que no se podía trabajar ni con niños ni con animales, la cinta Gioia Mia de Margherita Spampinato tiene todos estos elementos un grupo de niños y el tranquilo perro Frank. A todo ello se suma rodar prácticamente en un único escenario un viejo edificio de Trapani desde el que se contempla el mar. Un argumento simple pero efectivo. A Nico le cuesta aceptar la marcha de su querida niñera Violetta que ha dejado el trabajo para casarse. Con dos padres que trabajan y el verano por delante Nico es enviado a casa de su tía abuela Gela. El filme explora la relación entre ambos. Son dos mundos completamente diferentes que deben encontrarse, dos ritmos, la lentitud y la prisa, que tienen que aprender a convivir con el calor del verano. Inspirada en sus propias vivencias cuando Spampinato era enviada a Sicilia para pasar el verano es un filme del despertar y de descubrimiento, el primer amor, los juegos en el patio del edificio. Un mundo en el que los teléfonos móviles no tienen cabida. En el que se descubren los secretos, los manjares indispensables y las siestas y el dolce far niente.
Valeria Golino, Jasmine Trinca, Francesco Colella y el
jove actor Saul Nanni son los actores protagonistas de La Gioia, opera prima de Nicolangelo
Gerlomini. Cuando finalizan los 108 minutos de proyección, un nudo se hace en el
estomago. Inspirada en hechos reales que acontecieron en el 2015, el filme pretende
reflexionar sobre la educación sentimental recibida y como ésta puede influir en la manera
de percibir el amor. Una mujer adulta, profesora de francés vive atrapada en
casa de sus padres como cuidadora de su padre con Alzheimer. Solo conocía el
amor a través de Flaubert hasta que se cruza un estudiante repetidor, delincuente
en potencia que vive de su cuerpo y que ayuda a sobrevivir a su madre que
trabaja de cajera en un supermercado. Una reflexión Vale la pena conocer un instante
de la felicidadestudiante que ayuda económicamente a su madre usando su cuerpo.
Dos vidas frágiles que se reconocen y encuentran emocionalmente. Fue ganador
del premio Solinas 2021 y tuvo su premiere mundial en la Giornate degli autori
de Venezia.
Tras su paso por Sitges los espectadores de la MCIB pudieron
ver en el tercer pase del sábado La Valle dei sorrisi. Sergio Rossetti (Michele Riondino) llega a un pequeño como
profesor sustituto de gimnasia. Busca tranquilidad, pero pronto descubre que
algo extraño sucede. Cada semana, los habitantes se reúnen en torno a Matteo, un adolescente con un supuesto don: puede absorber el dolor y
las penas de quienes abraza. Lo que parece un milagro se convierte en un
fenómeno colectivo que roza la obsesión. Pero el dolor no desaparece solo se
transforma en este angelical niño al que hace referencia el título internacional. Con
un ritmo pausado y una atmósfera inquietante, Strippoli retrata cómo el miedo,
el trauma y la necesidad de consuelo pueden transformar a toda una comunidad. Un drama psicológico que ya destacó en el
Festival de Sitges y en el que se da a descubrir al joven Giulio Feltri. Los
derechos para las pantallas de nuestro país los tiene Alfa Pictures que ha
anunciado su estreno para el próximo mes de enero.
