20 años sin Audrey Hepburn

20 años sin Audrey Hepburn.

Ayer, 20 de Enero de 2.013, se cumplían 20 años de la desaparición de una de las actrices más relevantes de la Historia, Audrey Hepburn. Icono de la Moda, del chic más absoluto, solidaria, perfeccionista y con una sonrisa única, rompió moldes al ser una actriz diferente, muy delgada, menuda y con pelo corto, todo lo contrario de las mujeres que solían llenar las portadas de la época, voluptuosas y explosivas, como Marilyn Monroe.
Aún así, su belleza y estilo, han perdurado en la eternidad y siempre será recordada por sus increíbles papeles en el cine y por su aportación al mundo de la Moda, la elegancia y la clase suprema.
Por si alguien no lo sabe, Audrey Hepburn nacida en Bélgica en 1.929, vivió la 2ª Guerra de Mundial muy de cerca. Nacida en el seno de una familia aristócrata, su padre era simpatizante de los nazis y se divorció de su madre cuando Audrey era pequeña. Para ella fue una de las experiencias más traumáticas de su vida, según relató años después.

En 1.939, se trasladó a Holanda con su madre y sus dos hermanos huyendo del acecho nazi. Allí estudió ballet en un conservatorio.
La madre de Audrey, la llamaba Edda Van Heemstra, para ocultar su origen inglés y ser descubierta por los alemanes. La joven Audrey hablaba varios idiomas entre ellos el inglés, alemán, holandés, italiano y algo de español.
Aunque estudió para ser bailarina, el efecto de la guerra la obligó a tomar una nueva dirección y ser actriz.
Tras el desembarco de Normandía, los alemanes se hicieron con el control de la ciudad holandesa donde vivía Audrey y confiscaron alimentos, fusilaron y arrestaron a judíos todos los días y cometieron todo tipo de atrocidades, entre ellas mataron a un primo de Audrey.
Ella vivió todas estas matanzas muy de cerca.
Sufrió anemia y problemas respiratorios, por ello decidió dejar de bailar y dedicarse a la actuación. En teatro primero y en cine después, la fama mundial le llegó al protagonizar junto a Gregory Peck, la deliciosa Vacaciones en Roma de William Wyler.

Como curiosidad os contaré que, al ser debutante, en los carteles promocionales únicamente aparecía el nombre de Peck que ya era un consagrado actor conocido internacionalmente. Pero él, al ver lo maravillosa que era Audrey y lo bien que actuaba, dijo a la productora que, o aparecía los nombres de ambos en la promoción o quitaran también el suyo. Y así se hizo, y una desconocida actriz, de rostro angelical, brillaba con su nombre junto al de uno los galanes de HOllywood.
No era para menos, por esta maravillosa interpretación de la princesa Anne, obtuvo críticas abrumadoras y consiguió el Oscar.
A partir de ahí todo fueron éxitos para ella : Dos en la carretera, My Fair Lady, Una Cara con Ángel, son algunos de sus títulos más famosos.

En Sabrina, junto a Humprhey Bogart y William HOlden, conoció al diseñador Givenchy que diseñó el vestuario de la actriz para la película.
Como curiosidad, contaros que en un principio el diseñador pensó que era para Katherine Hepburn no para Audrey.
Desde ese momento se volvieron inseparables y fue su musa, vistiéndola dentro de las películas y en su vida privada y eventos. Dotándola de una elegancia inigualables y catapultando a la actriz al cielo de las estrellas con más glamour de todos los tiempos.

Sin duda, el papel de su vida, por la que siempre será recordada, es el de Holly de Desayuno con diamantes.
Esta película hizo que se convirtiese de inmediato en icono de la Moda, en referente de estilo y clase.
Otros títulos imprescindibles de Audrey son : Charada o Guerra y Paz junto a su esposo, Mel Ferrer.
Audrey destacó por su labor humanitaria durante toda su vida. Pero fue al final de su vida cuando más se volcó siendo embajadora de Unicef en África.
Viajaba mucho al continente y murió siendo recordada por muchos niños desnutridos como una auténtica dama que luchaba por los derechos de los más desfavorecidos.
Todos los vestidos, joyas u artículos que su Fundación ha subastado y que pertenecieron a la actriz, han sido donados íntegramente a su labor humanitaria.