A algunos muchachos les cuesta mucho admitir que se equivocaron y hacerse responsables de sus actos. Siempre son las víctimas. Están a la defensiva. Y siempre tienen la razón, son los demás los que se equivocan. Realmente, esa no es una buena manera de vivir, ya que los lleva a desaprovechar su potencial, vivir con …