Publicado por Ezequiel L
Hoy se cumplen 40 años de aquel hermoso día, triste para otros muchos, en el que el Caudillo de España por la Gracia ( y tanto) de Dios cayó derrotado por la madre naturaleza. Allí empezaba la Tercera Edad de nuestra querida Tierra Media, que una vez estuviera Entera, llamada España.
No es de extrañar que algunos liberaran su grito contenido, que algunos pensarán que se aproximaba el abismo o algo peor, otra República. Sin embargo, todos y absolutamente todos estaban en el fondo aliviados por el cambio. Era el momento, clave, crítico, para un cambio de fase, de ciclo, de régimen. Cualquier empujón en la dirección correcta cambiaría el curso de la Historia. Y como era de esperar se alcanzó un equilibrio por la equipartición de “todas las voluntades”, un equilibrio en forma de Status-Quo que permanecería durante toda la Edad. Pero los equilibrios se rompen.
Los orcos “dejaron de ser” orcos, de la noche a la mañana.
El Señor Oscuro cayó, pero no su voluntad. Ya que en el último momento, el Anillo no fue arrojado al Monte del Destino, y se ocultó, envenenó y alimentó condicias y sombras durante mucho tiempo. El encargado, nuestro querido Isildur, decidió traicionar el espíritu democrático, haciendo una transformación del Estado, una actualización de aquellas que te reinician el sistema, que cambian el Desktop pero el PC sigue yendo igual de lento.
Las sombras fueron creciendo, y lo que en un principio pareció un nuevo mundo de luz y de color, acabo tornándose en una fétida actualidad, con un hedor como los de antaño. La voluntad del Anillo está presente y va creciendo día tras día. Muchos ya están alerta, otros cultivan sus hortalizas alegremente en Hobbiton, esperando que los males se queden en las puertas de sus horizontes.
Se avecina una nueva oportunidad de enterrar la sombra para siempre. Hay todo tipo de personajes, existe Gollum, cuya codicia irracional de poder acabará siendo finalmente útil para todos en su inmolación. Tendremos nuestro Saruman, infidelidad latente al bien común del mundo para beneficio propio. Tuvimos nuestro Bilbo, que jugó con el poder de Anillo sin saber la gravedad del asunto. Es evidente que necesitamos un Frodo y un Sam que le haga contrapeso ideológico, no lo olvidemos exactamente dentro de un mes. Cada cual identificará a voluntad su personaje.
No hay que olvidar tampoco, que tal día como hoy existieron otros muchos hombres que no corrieron la misma suerte de morir en la hegemonía de sus voluntades, para desgracia de casi todos. Son un ejemplo para todos: se cumplen 79 años años del asesinato de Buenaventura Durruti en el frente de Madrid (Ciudad Universitaria).
Hoy, su último testimonio en la prensa pocas semanas antes de morir, adquiere una dimensión profética, inspiradora y revolucionaria:
“No le tenemos miedo a las ruinas. Vamos a heredar la tierra. No hay la menor duda sobre eso. La burguesía puede destruir y arruinar su propio mundo antes de abandonar la escena de la historia. Nosotros llevamos un mundo nuevo, aquí, en nuestros corazones. Ese mundo crece minuto a minuto.” (Entrevista de Durruti con Pierre van Paasen. Star, septiembre 1936)
Sin embargo, hoy no se dan cenas en su nombre, ni ninguna calle lleva su placa. Parecen asuntos de naturaleza menor, pero la simbología es importante para el pueblo, mueve las pasiones, es peligrosa y es conocida y controlada por los que gobiernan desde que existen jerarquías en el mundo.
Esperemos no ver la mano blanca de Saruman por las calles.
Bonus track: http://blogs.publico.es/strambotic/2015/11/cantando-francamente/
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure