A
principios de año quedé con una amiga para tomar un café. Estuvimos hablando de
los propósitos de año nuevo. El mío empezó bastante mal ya que el café se
convirtió en un chocolate con churros, así que tendré que pasar al segundo
propósito: ir al gimnasio.
Pero
no es de mis propósitos de lo que quiero hablar, sino del suyo: SER FELIZ. Ahí
es nada.
Uno
puede preguntar: ¿qué quieres conseguir este año? ¿Cuál es tu objetivo? Ser
feliz. La siguiente pregunta: ¿y para ti qué es ser feliz? Y aquí aparecen una
serie de ideas vagas, tan inespecíficas que hacen difícil la consecución de la
meta. Sinceramente me parece un proyecto extremadamente complicado de
especificar.
J.
A. Marina define la felicidad como “la armoniosa satisfacción de nuestras tres
grandes necesidades: el bienestar, la vinculación social, la ampliación de
necesidades”. Afirma que no se puede buscar directamente sino que surge de la
práctica de otras actividades. Además da un ejemplo que para mí es muy
clarificador: somos felices jugando, no jugamos para ser felices.
¿Cómo
hacer que un propósito tan amplio se concrete? Por un lado, recentrando:
centrarnos en algo más específico como, por ejemplo, quiero divertirme este fin
de semana. Esto implica también que tengamos que desglosar el propósito de gran
tamaño e inespecífico en otros propósitos más pequeños.
Por
lo tanto, la pregunta que uno se ha de hacer no es qué es ser feliz, sino qué
es lo que te hace feliz. Podemos pensar varias situaciones o cosas que nos
harían felices y luego valorarlas para ver si realmente proporcionan felicidad.
Es una buena estrategia buscar aquellas actividades que nos alegran la vida y
añadirlas a nuestra agenda para hacerlas YA.
Lo
que te hace feliz te hará disfrutar de la
vida. Uno puede pensar “vale, eso está bien, pero…¿por dónde empiezo?”.
Empieza disfrutando de lo que ya tienes. La felicidad depende de cómo vivimos
lo que nos ocurre, de cómo disfrutamos de lo que ya tenemos. Si tienes algo
especial guardado para una ocasión especial, ¡úsalo hoy! Hoy es ese día
especial.
Tú
decides cada día. Disfruta con lo que haces y celebra tus éxitos. Prémiate por
aquello que consigas.