J. Mendel debutaba en la Alta Costura y lo hacía con una colección muy rica en detalles, en la que los hombros al descubierto y las pieles eran las protagonistas. Me gustó mucho la paleta de marrones y dorados, inspirada en Klimt.
Alexandre Vauthier dio una magistral lección de técnicas artesanales en su colección que, como siempre, fue la más sexy de todas las que vimos.
Sin duda, donde John Galliano deja salir toda su imaginación y se permite todo tipode licencias en en los defiles de Alta Costura para Maison Margiela, casa en la que está actualmente y que ha hecho suya poco a poco. Siguiendo la estela teatral que le caracteriza y de la que ya había hecho gala en su paso por Dior, el gibraltareño presenta siluetas de distintas épocas traídas a la época actual.
Hacía tiempo que no me gustaba una colección de Jean Paul Gaultier y, concretamente esta, inspirada en los bosques japoneses, sus colores y los sentimientos que generan al individuo que los observa me ha parecido estupenda.
Una colección bohemia, inspirada en el espíritu de los 70, con ese toque romántico y cargado de lujosos detalles es la propuesta del libanés Zuhair Murad.
Vía Vogue.