A partir de 2018 todos los vuelos pilotados de las naves espaciales rusas despegarán desde el cosmódromo “Vostochni”, que se construye en Extremo Oriente, declaró hoy el viceprimer ministro ruso, Serguéi Ivanov.
Ya en 2015 desde allí se iniciarán los lanzamientos de cohetes con diversos cargamentos y satélites, añadió.
Actualmente todos los lanzamientos de cohetes pesados y de las naves tripuladas se llevan a cabo desde el cosmódromo de Baikonur, construido a fines de los años cincuenta y principios de los sesenta en las estepas kazajas.