Este día abandonábamos Gijón para dormir ya en Cangas del Narcea, pero teníamos dos visitas que queríamos hacer antes, el Parque del cabo San Lorenzo y la villa romana de Veranes.
El Parque del cabo San Lorenzo se encuentra al final de la playa del mismo nombre, por el paseo que discurre bordeando la playa. Hay muy buenas vistas y hay varios senderos por el que dar un agradable paseo, aunque nosotros no pudimos hacerlo porque hacía muchísimo aire. El mirador tiene forma de proa de barco.
En Gijón hay tres museos arqueológicos, las Termas Romanas de Campo Valdés (que habíamos visitado el día anterior), el Parque Arqueológico -Natural de la Campa Torre (emplazado en un castro del s. VI-V a.c( y la Villa Romana de Veranes, que era nuestra siguiente parada.
Al igual que en las termas, antes de empezar la visita te ponen un vídeo explicativo bastante interesante y que te ayudará a entender un poco mejor lo que verás a continuación.
Una villa romana es una explotación agropecuaria con dos partes diferenciadas: la zona residencial o pars urbana y la pars rústica. En la primera vive el señor de la villa y en la segunda están los espacios dedicados a la explotación del fundus, que suele concentrar grandes posesiones de tierra formando un latifundio.
La parte visitable en Veranes es la pars urbana, construida en el Bajo Imperio (S.IV d.C) . La mansión continuó en uso hasta el s. V d.C.
La visita a los restos arqueológicos se hace a través de un sendero. Destaca sobre todo el mosaico de la estancia de representación.
En menos de una hora podrás hacerte una idea de la importancia de esta villa y de las diferentes etapas que vivió.
Continuamos hacia Cangas, en donde comimos y descansamos un rato en el hotel, y luego salimos a pasear por el pueblo, eso sí, con el paraguas en mano.
Al día siguiente teníamos planeado acercarnos hasta el Centro de Interpretación de Muniellos y hacer una pequeña ruta de senderismo, pero esos planes tuvieron que cambiarse a la fuerza por la lluvia e, incluso, nieve que caía. Así que visitamos el Centro, lo recorrimos por fuera gracias a un pequeño sendero con varios miradores y de vuelta casa.
Decir también que tuvimos que cambiar sobre la marcha el trayecto de vuelta a casa debido a la nieve. Llegamos a un puerto de montaña donde la nieve ya era bastante importante y no había ni una sola marca de coches en la carretera, por lo que a pesar de retrasarnos bastante la hora estimada de llegada, dimos la vuelta y buscamos otra alternativa.
Quizás este no haya sido el mejor viaje que hemos hecho, sobre todo por la climatología, pero Asturias siempre tiene algo positivo que ofrecerte.
En las próxima entradas os hablaremos de los dos hoteles en los que nos alojamos en Asturias y de un finde en Madrid visitando Fitur y viendo el musical de El Rey León, así como del hotel escogido en Barajas. Y también os explicaremos cómo llegar desde el barrio de Barajas hasta el aeropuerto andando y ahorrando, de esta manera, el caro suplemento del metro, taxi.......