Es por esto que mientras iba de camino a Nueva York elegí ver todo tipo de películas y series ambientadas en esta ciudad durante el vuelo que me condujo de Europa al JFK. El problema es que la última que vi fue la Terminal con Tom Hanks debido a ello agarré mi pasaporte con fuerza no fuera a perderlo o que alguien me lo robara.
Me quedó la pena de no poder ver mi película favorita, Taxi Driver, con Robert De Niro dirigida por Martin Scorsese pero disfruté de series como "Gossip Girl" o "Sexo en Nueva York" que me dieron una idea de lo que podía acontecer. Además, cogí un taxi en el aeropuerto que me llevó directo a mi hotel para resarcirme.Iba a alojarme en el hotel Plaza perteneciente a la compañía Accor. The Plaza, A Fairmont Managed Hotel. Un majestuoso y señorial a la par que histórico hotel, situado justo en la entrada con Central Park por la parte sur y justo al lado de la Quinta Avenida. No había tiempo que perder. Y tras dejar las maletas en el susodicho hotel me dispuse a comprar ropa en la Quinta Avenida para la fiesta que iba a acontecer esa misma noche. Tras una par de horas comprando en las tiendas de la Quinta Avenida. No solo tenía ropa de primera calidad y mi vestuario para ese día sino que ya estaba aclimatado a Nueva York. Para sentirme incluso más integrado, recorrí parte de Central Park practicando running, parando deliberadamente cerca del lago a tomar un aperitivo tal y como la foto demuestra (ropa casual sin embargo)24 horas en Nueva York. (zumo de naranja en Central Park)
Tras una relajante ducha bajé a la calle y fui andando a coger un ferry y recorrer la costa de la isla de Manhattan pasando de largo la estatua de la libertad. La vista panorámica de Manhattan me dio una sensación única con la inconmensurable estatua de la libertad como testigo de excepción. En vez de volver al mismo punto de partida decidí bajar en el sur de la isla de Manhattan, justo donde se coge el barco para ir a Staten Island, en la estación conocida como South Ferry.Desde allí anduve hacia el norte de la isla, hasta mi hotel Plaza. Así había recorrido la isla de Manhattan en su totalidad (más o menos), primero corriendo por central park, yendo en ferry por la costa y al finalizar andando a lo largo y ancho de las calles principales con tiempo para admirar cada detalle, observando a los viandantes, sintiéndome un ciudadano de Nueva York más y realizando paradas estratégicas en el memorial del 11 de Septiembre, National September, 11 Memorial, mostrando mis respetos con una corona de flores. Haciendo fotos en los teatros de Broadway, en Wall Street, en el edificio de las Naciones Unidas y subiendo a lo más alto del edificio Empire State para admirar Nueva York desde las alturas. Tanto es así que exclamé apasionadamente: ¡¡Manhattan y Nueva York son mías!!. Una vez en Times Square comería algo rápido en la calle, un perrito caliente, un refresco y patatas fritas mientras algún artista cantaba para la televisión en directo. No perdí un segundo porque tenía entradas para ver a los New York Knicks en el Madison Square Garden y disfruté de este modo de un partido de baloncesto NBA de excepción entre los New York Knicks y los Cleveland Cavaliers. Tras el partido tenía asientos de primera fila para ver el desfile de Victoria´s Secret pero el choque se alargó debido a una inoportuna prórroga y una inesperada victoria de los Nueva York Knicks que me hizo olvidar el retraso. No importó en absoluto porque la fiesta de después del desfile era en el mismo Hotel Plaza y pude cenar con las modelos en el hotel que tras tantos meses a régimen podían comer de todo aquella noche. Tras cenar íntimamente con ellas y escuchar sus secretos más inconfesables me arreglé con la ropa comprada por la mañana y vivimos una eterna fiesta con la créme de la créme. Los mejores profesionales del mundo de la moda, modelos y diseñadores famosos, autoridades, millonarios, inversores, filántropos, celebrities, corredores de bolsa, escritores, jugadores de béisbol, periodistas, músicos, cantantes punk y de hip-hop, blogueros de Europa, estrellas de cine, artistas… No faltaba nadie a decir verdad. Gente de Nueva York y de todo el mundo que habían sido invitados a esta exclusiva fiesta en el Hotel Plaza de Nueva York. Conocí a gente espectacular, hice contactos, me hice fotos con todo el mundo que subí a las redes sociales. De hecho, mis fotos fueron ¡¡trending topic en internet durante 5 horas!! La fiesta fue inolvidable, conversé con infinidad de personas singulares.
Sin entrar en más detalles, este Hotel Plaza fue testigo por ejemplo de una histórica fiesta organizada por Truman Capote que todavía se recuerda o fue el lugar que albergó a The Beatles en su primera visita a Nueva York. En consecuencia, solamente grandes eventos pueden suceder de resultas.
Disfruté de la música del mismo modo, Lady Gaga era la protagonista que tras haber actuado en el desfile de Victoria´s Secret también lo hizo en esta fiesta junto a The Strokes y Jay Z que al ser todos de Nueva York como Lady Gaga tocaron en el desfile y en esta velada nocturna. De hecho, hacía tiempo que Lady Gaga y Jay Z no sacaban nuevo material y además los Strokes se reunían de nuevo tras años separados.Como los Knicks habían ganado a los Cleveland Cavaliers todo el mundo estaba muy contento en especial Spike Lee que se encargó de que esa noche no faltara de nada. Amablemente dejó pagados innumerables cócteles manhattan, para algo estábamos en la isla de Manhattan. Y así se hizo de día y las 24 horas en Nueva York se acababan. Me despedí de lasmodelos de Victoria´s Secret y de sus maridos. Recogí mis maletas y mis recuerdos después de haber consumido un café americano doble con 3 bagels.
Me estaba durmiendo y estaba triste, creía que toda la magia se había evaporado irremediablemente. Solicité un taxi con una nueva aplicación de teléfono móvil y tuve que compartirlo con dos vejestorios, dos personas mayores que hablaban de su nuevo proyecto profesional en Manhattan. Me dormía y oír a dos anticuados lo hizo incluso más, presté atención de soslayo, con desdén y de forma burlona. El taxista me dijo que había que parar en Little Italy antes de ir al aeropuerto. No me importó. Los dos viejos hablaban sin parar. Cuando bajaron del coche en Little Italy me di cuenta de que eran Robert de Niro y Martin Scorsese que discutían localizaciones para su nueva película y sin más me vi en un avión regreso a Europa. Pude por fin ver la película Taxi Driver y el desfile completo de Victoria´s Secret en el avión de regreso sin decirle a nadie en absoluto (ni a la persona que iba a mi lado en el vuelo) como son las supermodelos una vez termina el desfile de Victoria´s Secret ni mucho menos como va a ser la próxima película dirigida por Martin Scorsese con Robert De Niro de nuevo como actor principal. 24 horas en Nueva York. Versión en inglés 24 Hours in New York 24 hours in New York