263. Cosa de dos

Huerto urbano en Bamako. Julio 2013

Última semana de campaña electoral en Mali. La ciudad (como mínimo, parte de ella y a ratos) es una fiesta democrática.
Regularmente (especialmente este fin de semana), la atraviesan hordas de motoristas uniformados en grupo con las camisetas de uno de los candidatos (la mayoría, de IBK) lanzando consignas (imagino que son consignas, mi bambara no ha mejorado mucho estas últimas semanas) a favor del candidato.
Otros partidarios de candidatos con menos medios o menos entusiastas se dedican a alquilar los pequeños mini buses que atraviesan la ciudad y empapelarlos de arriba a abajo.
La campaña ha venido marcada por los acontecimientos en el Norte, especialmente en Kidal, ciudad medio liberada, medio en poder de los tuaregs. IBK, muy hábil la visitó al inicio de la campaña. Soumalia Cisse, en Jeune Afrique declara que intentará ir si las condiciones de seguridad lo permiten. Malo, que un candidato a presidente no pueda hacer campaña en una parte de su propio país.
Ha habido un abandono, Drame, quejoso de sentirse discriminado y de querer retrasar la fecha.
Comí la semana pasada con dos observadores de la Unión Europea. Discretos, no hablaron mucho pero se deducía que todo iba bien. A los dos días secuestraron a cuatro compañeros suyos, retenidos durante 24 horas por los tuaregs para "compartir" sus inquietudes .
La pregunta ¿quien ganará? La respuesta es que todo parece indicar que los dos caballeros de la foto. IBK juega el papel de "el hombre fuerte", clamor popular a su favor allá donde va. Soumaïla, menos seguidores pero más entusiastas, no para de asegurar que tiene la victoria al alcance de la mano.

"IBK se explica" y "Las certezas de Soumaïla Cissé", dos entrevistas de Jeune Afrique 

Los mensajes de ambos son muy parecidos (por la unidad del país, por el bienestar de los malienses, por el progreso....). Los dos han quedado "segundos" en unas elecciones (Cissé en 2002 y Keita en 2007), derrotados por ATT. Los dos preparados para liderar un país necesitado de una dirección fuerte, clara, democrática y legitimada para gobernar, cosa que no ha pasado en los últimos años.
Salvo mayoría aplastante, habrá una segunda vuelta para ambos el 11 de agosto. Entonces sí, se jugarán el todo por el todo. El resto de candidatos se tendrá que posicionar por uno o por otro y el que arrastre a más arrastrará consigo a la mayoría de los votantes, de ahí que no haya habido muchos insultos entre ellos, pueden ser futuros aliados.
¿Que candidato os inspira más confianza? Haced vuestras apuestas pero los malienses tienen la palabra el próximo domingo.