Los caprichos de la distribución han vuelto a hacer coincidir dos estrenos de cintas de coproducción italianas en una misma jornada con dos registros totalmente diferentes. Maravigloso Boccacio firmada por los hermanos Taviani y Un Italiano en Noruega de Gennaro Nunziante. Inspirada en el Decameron, los hermanos Taviani narran una vez más historias de amor en tiempos de desesperanza. Su particular versión del clásico de Bocaccio está ambientada en 1348 en una Florencia asolada por la peste. Un grupo de diez personas - siete chicas y tres chicos - deciden escapar de la ciudad para pasar varios días sin preocupaciones en una antigua casa de campo. La única regla es que cada uno debe contar una historia de amor. El filme de los Taviani es una paleta de colores que recuerdan a las pinturas renancentistas de Botticelli, Giotto o Masacchio de los que los propios directores han reconocido su fuente de inspiración. La cinta se pudo ver en la edición del 2016 de la Muestra de Cine Europeo de Segovia
Unos días más tardes de su presentación en el I Festival Internacional de Cine de Barcelona-Sant Jordi llega a nuestras pantallas Un Italiano en Noruega de Gennaro Nunziante una comedia que ha llevado al cine a más de 10 millones de espectadores para narrar las peripecias de Zecco que luchará a toda costa por mantener un puesto fijo de por vida aunque para ello tenga que irse a una estación científica en el Polo Norte. ¿Conseguirá el tándem de Gennaro Nunziante y Checco Zalone también conquistar al espectador español? 
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