Revista Historia
El editor de este blog ha recibido varios comentarios donde se le hace notar queLa Biblia, por su condición de “libro de inspiración divina”, es inerrante, es decir que no contiene errores; de igual manera señalan que en el libro en cuestión no existen contradicciones.
En esta entrada vamos a confrontar dos libros, deLa Biblia, que son considerados “históricos”: 2º de Crónicas, versus 1º de Reyes, en ellos encontramos algunos versículos que se refieren a cuestiones relacionadas con el Templo de Salomón, y en esos capítulos/versículos apreciamos errores/contradicciones.
Cuando hacemos una proposición o aseveración, y posteriormente hacemos otra que se opone a la primera, incurrimos en contradicción.
Las contradicciones a las cuales vamos a referirnos las encontramos, como ya señalamos, en 2º de Crónicas y 1º de Reyes; estamos conscientes que son dos libros distintos, escritos en épocas distintas y de autores distintos (los dos anónimos), sin embargo ambos libros se encuentran en uno solo:La Biblia, libro que es “inerrante”, según sus seguidores, por lo que no debería contener tales dislates habida cuenta que es de “inspiración divina”.
¿Cuántos fueron los supervisores que trabajaron en la construcción del Templo de Salomón?
Tres mil seiscientos
2º de Crónicas 2:22.- Entonces Reclutó a 70.000 cargadores, a 80.000 canteros en la región montañosa, y a3.600 supervisores.
Tres mil trescientos
1º de Reyes 5:16
16.- sin los principales oficiales de Salomón que estaban sobre la obra,tres mil trescientos, los cuales tenían a su cargo el pueblo que hacía la obra.
¿Cuál era la capacidad, en batos, que tenía el mar de bronce?
Tres mil
2º de Crónicas 4:55.- La fuente Tenía un palmo menor de espesor; su borde era como el borde de un Cáliz o de una flor de lirio. Tenía una capacidad de3.000 batos
Dos mil
1º de Reyes 7:2626.- El grueso del mar era de un palmo menor, y el borde era labrado como el borde de un cáliz o de flor de lis; y cabían en éldos mil batos
Los capítulos/versículos tratados en esta oportunidad no dejan espacio a la interpretación, a la especulación, hacen alusión a cantidades, a números.
Es obvio que alguien se equivocó, ¿el traductor?, ¿el transcriptor?, ¿el autor?.
Sea que se haya equivocado el autor, el traductor o el transcriptor, es evidente que hay contradicción.
Partiendo de la premisa (incierta), que una de las proposiciones sea veraz concluimos que la otra no lo es, en consecuencia es un error, una mentira, lo que pone en tela de juicio la tan cacareada “inerrancia” bíblica.
El editor de este blog no pretende, de ninguna manera, que los lectores dejen de lado sus creencias, su fe.
“La Biblia Mentiras” tiene como norma, y así lo hacemos constar en la cabecera del blog, la tolerancia, el respeto a las creencias de cada quien, pero cuando encontramos,
¡y hay que ver que hemos encontrado!,
mentiras, incongruencias, inconsistencias, contradicciones y/o aberraciones, en ese libro señalado como de “inspiración divina”, nos sentimos obligados a hacerlas públicas, y seguiremos haciéndolo.