Las claves para que un deportista alcance su máximo rendimiento deportivo son tres: el entrenamiento, la alimentación y el descanso. Vamos a ver cómo las alteraciones en estos tres parámetros afectan negativamente al rendimiento de un deportista.
Dos de las causas más comunes del estancamiento del rendimiento de un deportista son el sobreentrenamiento y la falta de descanso. - piopialo
Entrenamiento
La forma más segura para cerciorarnos de que estamos entrenando correctamente es si seguimos los consejos de un entrenador o preparador físico. También hay muchos deportistas aficionados que tienen buenos conocimientos sobre la preparación física y no necesitan la ayuda de un profesional.
Los errores más comunes que se cometen en el entrenamiento son los siguientes:
Tipo de entrenamiento
Para obtener un buen rendimiento deportivo es importante estresar a nuestro organismo. Esto se consigue variando los entrenamientos. Si siempre entrenamos igual nuestro organismo se acostumbrará a ese tipo de entrenamiento y nos estancaremos.
En este punto puede ayudarnos considerablemente un preparador deportivo.
Sobreentrenamiento
Este es un error muy común entre personas aficionadas que están apasionadas por su deporte. “Cuanto más entrene más mejoraré”. Esta reflexión no es para nada cierta, ya que al cuerpo hay que dejarse descansar para que asimile los entrenamientos y podamos mejorar.
Si nos pasamos con el entrenamiento lo único que vamos a conseguir es fatigar a nuestro organismo y que el rendimiento no sólo no aumente, sino que disminuya. Además el sobreentrenamiento conlleva un alto riesgo de lesión.
Alimentación
Por muy bien que entrenemos no obtendremos nuestro máximo rendimiento si este entrenamiento no va acompañado de una alimentación específica que esté relacionada con el deporte que practicamos.
La alimentación nos va a permitir obtener la energía necesaria para rendir al máximo en nuestro deporte.
Si nos quedamos cortos con la alimentación no tendremos la energía suficiente, y si nos pasamos aumentará nuestro peso.
Además la alimentación variará según el deporte que practiquemos.
Descanso
Quizá este sea el punto en el que más fallan los deportistas aficionados. El descanso es fundamental para que el organismo asimile todo el esfuerzo realizado en los entrenamientos y mejore el rendimiento.
La cantidad de horas recomendadas de sueño al día se sitúan entre no menos de 6 horas y no más de 8 horas. Además no solamente es importante la cantidad de horas de sueño, sino también la calidad. De poco va a servir dormir 8 horas si hemos tenido un sueño agitado y poco reparador.
Factores como el estrés y el cansancio van a influir negativamente tanto en la cantidad como en la calidad del sueño.
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