Sí, todos tenemos planes, metas, sueños, objetivos... pero el tiempo pasa y la mayoría de la gente va viendo como esos sueños se van desvaneciendo por el camino, dando paso al conformismo y en algunos casos a la resignación.
Debemos pararnos a pensar que variables principales nos impiden vivir la vida que queremos. Hoy sólo apuntamos tres que son especialmente relevantes y que según los abordemos, con valentía o cobardía, determinarán para bien o para mal el curso de nuestro vida.
1. DUDAS SOBRE TI MISMO.En esta vida, todo se basa en aumentar la confianza en un mismo. Porque como tú te ves y sientes así actúas. Cada persona vive dentro de su propia historia. Y esa intrahistoria no es otra cosa que creencias depositadas en nuestro inconsciente en los primeros años de nuestra vida. Nada influye tanto en nuestro comportamiento como la creencia sobre nuestra capacidad para hacer algo. Si creo que puedo hacer algo me podré en marcha y adquiriré las capacidades necesarias aunque no las tenga al principio; y si creo que no puedo no hacer algo no me pondré en marcha y me quedaré como estoy. La falta de confianza en uno mismo es el principal problema con el que tiene que lidiar la mayoría de la gente. La mayoría de personas se fija metas pequeñas porque se siente pequeña, y esa visión limitada y estrecha les lleva a apuntar bajo. En una de las escenas de la película El lobo de Wall Street se dice: "Lo único que está entre tu meta y tú es la historia que te sigues contando a ti mismo de por qué no puedes conseguirla". Lo que nos impide avanzar en la vida no es la falta de talento sino la falta de confianza en uno mismo para explotar y desarrollar el talento que todos nosotros tenemos. Tu principal obstáculo no está fuera de ti sino dentro de ti.
En el ser humano hay una tendencia natural a hacer lo más cómodo, lo más fácil, la alternativa que conlleva menos inconvenientes. Pero ya sabes: si haces lo mínimo, obtienes lo mínimo. Los grandes logros esperan con los brazos abiertos a quienes están dispuestos a hacer lo que otros no quieren hacer. La pereza es lo contrario de la disciplina, y la disciplina es hacer lo que se tiene que hacer aunque no apetezca; la disciplina es hacer lo que se tiene que hacer aplicando la regla de cero excusas. A menudo, lo difícil no es saber lo que hay que hacer, sino hacerlo. Jim Rohn, referente del desarrollo personal y personaje incluido en Aprendiendo de los mejores (Alienta, 13ª edición) apuntaba: "La gente no consigue resultados porque prefiere hacer lo cómodo a lo necesario". Y la disciplina es un concepto asociado siempre al medio y largo, porque todo el mundo tiene momentos puntuales de disciplina, pero se trata de ser constantes siempre. Todo el mundo hace cosas que hace la gente de éxito, la diferencia es que la gente de éxito hace esas cosas siempre.
El miedo, de una manera u otra, siempre está presente en nuestras vidas. A veces aparece disfrazado con un traje y en otras ocasiones con otro. En cualquier caso, el miedo es lo que lo que nos lleva a llevar vivir vidas pequeñas y vidas por debajo de nuestro auténtico potencial. El miedo siempre te hace que te quedes amarrado en puerto seguro y así no se puede conseguir nada destacable. A veces será el miedo al fracaso, otras el miedo al cambio, en ocasiones el miedo al ridículo... Miedo, miedo y más miedo. Como hemos repetido otras veces, en la vida se puede ganar o perder, pero lo peor del miedo es que te derrota antes de luchar, y eso es triste. Si no arriesgas, tu destino está escrito de antemano. Sí, es cierto, cuando uno se arriesga las cosas no siempre van bien. Es más, habitualmente suelen ir mal antes de ir bien. Ya apuntamos en El éxito se resume en media docena de cosas, que el precio del éxito es el precio del aprendizaje y el precio del aprendizaje es el precio del error. La decepción forma parte del camino del camino de los ganadores. Un poco de decepción siempre es el precio a pagar por pensar en grande. Recuerda las palabras del escritor británico Neil Gaiman: "Si no te atreves a nada, entonces, cuando haya terminado el día, nada será lo que hayas logrado".