El director Cosimo Gomez presentó el mismo ante los espectadores que acudieron a la sesión nocturna de la tercera jornada del Festival Italiano de Madrid su ópera prima Brutti e Cattivi una disparatada comedia que pretende ser un homanaje al cine de postguerra y particularmente a la cinta Brutti, Sporchi e Cattivi de Ettore Scola, en la que se exagera todavía más el componente grotesco y la ambientación en la periferia romana lo que le da al filme un aire muy contemporáneo. Casi cinco años y tardó el proyecto en hacerse realidad ya que al igual que otras óperas primas tuvo que enfrentarse a buscar los fondos necesarios para producirla. En este sentido la cinta cuenta con la producción de la Rai, de los fondos de Euroimages, "a los que tanto cuesta llegar", de la coproducción francesa que hizo posible los impecables efectos especiales y del Ministerio de Cultura Italiano. Se trata de una comedia negra en la que una banda de frikis formada por Il Papero (El Pato), Ballerina (Bailarina), Il Merda (El Mierda) y Plissé se meten a atracadores para conseguir 4 millones, un golpe que cambiará sus vidas. No importa si el primero no tiene piernas, si Ballerina, su bella esposa, no tiene brazos, si Merda es un perroflauta tóxico y Plissé un rapero enano. Solo son detalles. Para ellos no hay obstáculos. Solo sueños. Gómez reinvindica el papel que las personas con discapacidad sean iguales en el bien y en el mal. De hecho lo recuerda como un rodaje divertido en el que todo el mundo se lo pasó bien haciendo gamberradas. Brillante la camaleónica Sara Serraioco (Cloro, Salvo) que al igual que Claudio Santamaria tuvieron que seguir un entrenamiento especial previo al filme para hacer todavía más creíbles sus personajes. Previo al largometraje se pudo ver el cortometraje que abrió la Semana de la Crítica del festival de Venezia la historia de la princesa Nausicaa L'Altra Odisea de Bepi Vigna y el documental ganador de los premios Davide de Donatello Crazy for Football de Volfango de Bias.