Los tres nacieron en el continente africano.
Ansi Fati celebrando un gol (Imagen captada en Twitter)
El primero en Guinea Bissau, el segundo en Mali y el tercero en Liberia. Los tres tienen algo más en común: han conseguido la nacionalidad de un país europeo de forma diferente.
Con 16 años, Ansu Fati es la nueva gran estrella del F.C.Barcelona.
Debido a que había vivido en Portugal existía la posibilidad que en el futuro se nacionalizase portugués por lo que el mes pasado y por procedimiento de urgencia el Consejo de Ministros le concedió la nacionalidad española para poder ser convocado con la selección nacional.
Nos alegramos por Ansu y le deseamos muchos éxitos.
Mamadou Gassama, imagen captada en Periodista Digital
De Mamadou Gassama ya hemos hablado en este blog El "Spiderman de Mali" escaló un edificio a velocidad de vértigo para salvar a un niño que pendía de una mano en un balcón.Al día siguiente fue recibido en el Eliseo por el presidente Macron y se le prometió la nacionalidad francesa.
Nos alegramos por Mamadou y le deseamos muchos éxitos.
Howard Jackson es alguien muy conocido para los sevillanos.
Howard Jackson, imagen captada en La Vanguardia
Suele trabajar disfrazado y es muy conocido en la ciudad. Solicitó la nacionalidad española y la consiguió hace poco. Nos alegramos por Howard y le deseamos muchos éxitos.
Tres historias, tres personas que consiguen la nacionalidad de diversa forma.
Pero... ¿y las millones de personas que trabajan cada día (como Howard) durante años en nuestro país, que contribuyen con impuestos, pagando la seguridad social, generando riqueza, teniendo hijos que ayudarán a pagar futuras pensiones, que ofrecen servicios, trabajos, inteligencia y esfuerzo y cuya situación jurídica pende de un hilo?
¿Es necesario condenarlas a la incertidumbre?
¿Conseguir la nacionalidad española debería ser la carrera de obstáculos que es actualmente?