La bicicleta es uno de los juegues estrella de los niños. Para aprender a montar en bicicleta hay que seguir una serie de pautas muy sencillas que nos ayudarán notablemente con los más pequeños.
No precipitarse
Cada niño es un mundo, y para que puedan montar en bici tienen que estar preparados madurativamente. Habrá niños que tengan bien desarrollado el sentido del equilibrio con apenas dos años, y otros que hasta pasados los 3 ó 4 años no lo tengan.
Cada uno tiene su momento, y los adultos debemos intuir cuándo realmente nuestro niño está preparado para montar en bicicleta.
Comenzar en un lugar seguro
Cuando estamos comenzando a enseñar a un niño a montar en bicicleta es fundamental hacerlo en un lugar seguro. Lo ideal es ir a un parque o a algún parking donde no haya nadie ni molestemos a nadie.
Puede ser muy peligroso comenzar a montar en bici si estamos rodeados de peatones, otras bicicletas e incluso vehículos.
Comenzar con la bicicleta adecuada
Por suerte actualmente con las denominadas bicicletas de iniciación. Estas bicicletas no llevan pedales y los niños se impulsan con sus propias piernas. De este modo aprenden a mantener el equilibrio de una manera intuitiva y muy sencilla.
Es también muy importante que la talla de la bicicleta sea la del niño, ni más grande ni más pequeña.
Cuestión de confianza
Es muy importante que los niños se sientan confiados cuando se suben a la bicicleta. Al igual que ocurre con el equilibrio cada niño es un mundo. Habrá niños que vayan muy confiados desde el primer momento y otros que les cueste un poquito más.
Tendremos que adaptarnos al niño en cuestión y tener la paciencia necesaria hasta que se vean totalmente seguros encima de la bici.