i hace poco tiempo que vivís juntos y necesitáis organizar las cuentas, o tal vez porque vuestra economía doméstica es un caos, es el momento de analizar la situación financiera con tu pareja.
Todo parece idílico entre los dos: os queréis, pasáis el tiempo libre juntos, hacéis planes de futuro… pero ¡vuestras cuentas y gastos son un desastre! Para que la mala gestión de las finanzas no os afecte te damos 4 consejos para la relación no caiga en número rojos.
1- Mio, nuestro: El primer paso es cambiar el chip y dejar de pensar solo en ti. Ahora que vivís juntos lo que es de uno debe ser también del otro. Compartir vuestras alegrías y penas está bien, pero eso debe ir más allá. Los gastos, las facturas… tienen que ser de los dos. Es hora de pensar a dúo.
2- Dos sueldos, una cuenta: Si como hemos dicho compartís gastos, lo mejor es que abráis una cuenta común. En ella tenéis que ingresar mensualmente la totalidad de vuestra nómina, y a partir de ahí organizar gastos, o bien un dinero fijo, la cantidad la debéis establecer vosotros según vuestros ingresos y gastos. Centralizar el dinero en una misma cuenta os ayudará a organizar un plan económico.
3- El plan económico: En él no solo tenéis que especificar gastos (compra de alimentación, cenas fuera de casa…) y facturas (luz, internet…) también debéis marcar vuestros objetivos financieros a corto y largo plazo. La compra de una casa, un viaje, cambiar de coche… Vosotros sabréis cuáles son, eso sí, proponed cumplirlos hasta el final.
4- Ahorrar para ganar: Bien para cumplir vuestros objetivos, o simplemente por tener un colchón económico por si algo fuera mal. Al principio puede que os cueste, pero una vez empecéis a apartar parte de vuestro dinero para el ahorro familiar será sencillo. ¿Algunas ideas? Compartir coche, hacer planes en casa, llevaos la comida al trabajo…