¿La buena noticia? Que puedes darle un lavado de cara invirtiendo poco tiempo y menos dinero, para devolverle el esplendor y hasta cambiarle la cara, pareciendo que estrenas cocina este próximo fin de semana.¿Cómo? Muy sencillo, aquí van 4 maneras de darle una vuelta:1. Pinta los armarios
¿Te has cansado de su color o está muy estropeado? Elige otra combinación con el resto de la estancia –otros muebles, cuadros, electrodomésticos…- y reinventa tu cocina. Puedes pintarlos –si son de madera natural- o barnizarlos, y también emplear acabados especiales que podrás encontrar en tu tienda habitual de bricolaje, como los laminados plásticos de Formica.2. Pon una pizarraSí, puedes poner una de corcho y madera que compres o mandes hacer a medida, claro. Pero nosotros nos referimos a convertir al menos una pared de la cocina en pizarra.En este post te enseñamos cómo convertir cualquier pared de tu hogar en una divertida y práctica pizarra, gracias a la pintura sintética de acabado mate que hace las veces de este mineral y se puede pintar en cualquier superficie lisa (y si en la tuya hubiese juntas, tápalas primero con Aguaplast).Pues bien, elige una de tus paredes y dale vida:coloca tizas de colores a mano para que podáis dejaros notas, recetas, ideas, mensajes, división de tareas de la casa, dibujos… Puede ser la lista de la compra perfecta, haciéndole una foto con el móvil antes de salir al súper.Además de pizarra, puedes convertir tu pared en un gigantesco imán con un poco de pintura magnética. Ojo, no lleva imanes, sino pequeñas partículas de hierro que atraerán a los mismos a tu pared. Vamos, que podrás jugar con ella como si de un gran frigorífico se tratase.3. Pinta o cubre los azulejos
Desengáñate, no tienen por qué permanecer iguales toda la vida. Puedes pintarlos con pintura de esmalte, y probar con pintura mate o satinada para darles un toque más original.También puedes cubrir la parte que desees con cristal lacado, de acabado mate o brillo, como los vidrios de la marca Lacobel. Se pega directamente sobre el azulejo, tapándolo, y tienes una gran cantidad de colores a tu disposición. Es facilísimo de limpiar con un paño húmedo y su brillo hará que el espacio aumente ópticamente, gracias a la profundidad del efecto espejo.Por cierto, espejar las paredes es otra opción muy interesante: ganarás luz y espacio.
Otra idea: coloca papel pintado. Eso sí, en la cocina, mejor de vinilo para facilitarte su limpieza y alargar su vida. Igual que con la idea de la pizarra: si quieres colocarlo sobre juntas, tápalas primero con Aguaplast.
4. Mirando más abajo: renueva el suelo
Hemos repasado armarios, paredes, muebles, azulejos… pero el suelo es otro componente visual de cada estancia con muchas posibilidades.Se puede sustituir sin grandes obras y por muy poco dinero. Solo necesitas cambiar el suelo de azulejo por uno laminado, colocando un plástico aislante sobre tu suelo para protegerlo de la humedad. Una vez hayas colocado una base especial para instalar láminas sobre este plástico, podrás colocarlas y seguir adelante con los zócalos.¡Tachán! Tu nuevo suelo estará listo para dar un aire nuevo a tu cocina.¿Qué te parecen todas estas ideas para reinventar tu cocina? ¿Se te ocurre alguna diferente para darle nueva vida?Via. http://blogs.20minutos.es