(Fuente: Yoyopress - Venezuela)
Al país se le ven las costuras y este ajuste salarial solo redunda en que el presidente necesita que los verdes sigan con él, no importa lo que roben, lo que guisen pero que estén con él para que la revolución – ya sin ningún sentido – siga siendo la burla mundial de un país quebrado. Con el mentado aumento, los militares no se meterán con sus jefes – los colectivos – y estarán tranquilos guisando con la compra de vehículos y propiedades que consiguen a mejor redito por su condición de militar.(Fuente: El Tiempo - Venezuela)
Triste andar el de Venezuela cuando los que mejor ganan son estos tipos que no les importa la patria. Arrodillados a los cubanos y los colectivos, los militares venezolanos – con su bozal de bolívares/guisos/dólares – se convirtieron en la peor escoria de la nación. No pudieron defender a la nación de la invasión cubana, no pudieron defender a la nación de la destrucción y como premio reciben su bozal para que callen y se lo calen.(Fuente: El Tiempo - Venezuela)
Resulta inconcebible que algunas de las profesiones más importantes de una nación, los maestros y los médicos entre otros, ganen sueldos ínfimos que los invita a largarse del país. Todavía más alarmante que los educadores vivan situaciones inhóspitas que los obliguen a ejercer otras actividades económicas ante la imposibilidad de ejercer aquella labor que les apasiona.(Fuente: Maduradas - Venezuela)
Con la educación y la salud en el colapso, los militares disfrutarán de su aumento entre muerte y destrucción. Tanto le mentaron a la cuarta república lo que la quinta está multiplicando a la enésima potencia. En aquellos países de verdadero socialismo, los maestros y los médicos suelen ser los que mejores sueldos tienen porque su labor va relacionada con el desarrollo de aquellos países, acá ya veis que ganan más aquellos que protegen a los que han destruidos el país en estos 15 años de involución.(Fuente: VeusNoticias - Venezuela)
Algún día los milicos lamentarán todo lo que pasa. Cuando los de su misma sangre les reclamen como entregaron un país y una soberanía a cambio de silenciar un país que quebró en lo económico, político, social y espiritual. Apuren el trasero, a los milicos, que no tendremos whisky – la bebida oficial de las fuerzas armadas nacionales - en diciembre y ya ven como se ponen estos tipos cuando no pueden beber su preciado líquido.(Fuente Ríete del Gobierno - Venezuela)
Que me disculpen los militares o familiares de militares que lean, lamentablemente son buena parte de los causantes de que Venezuela este haciendo un ridículo de dimensiones bíblicas, hemos caído en una vorágine de mediocridad y violencia – entre tantas otras cosas – que estamos viviendo una destrucción que podría llegarnos hasta el alma. Me queda el recuerdo de la cara de héroes de los milicos atacando a estudiantes y la cara de terror cuando alguna vez tuvieron – así fuera un acto – que enfrentar a sus jefes, los colectivos. Más allá de los retirados, no me creo el cuento de los institucionalistas o como se quieran llamar, el silencio ante la obra delincuencial de las fuerzas armadas les hace cómplices.