Como tienden a ser muy selectivos con sus alimentos, solemos pensar que los gatos saben exactamente qué es lo mejor para ellos. Pero el hecho de que se apartarán de un pedazo de carne que esté en descomposición no quiere decir que dejarán de comerse una lata completa de atún. Y este último alimento, contrario a lo que se piensa, puede llegar a ser perjudicial para tu mascota.
Te presentamos una pequeña guía de todas aquellas comidas que tu gato no puede, o no debería comer.
1. Uvas o pasas
Las uvas y las pasas, son generalmente utilizadas en tratamientos para las enfermedades de las mascotas. Sin embargo, no es una muy buena idea. Aunque aún no existen estudios que lo expliquen, estos alimentos pueden llegar a causar fallas en el hígado de tu mascota. Vómitos e hiperactividad son señales tempranas del efecto que pueden llegar a causar, pero podrían llegar también a causar problemas en sus pequeños intestinos.
2. Cebollas, cebollín y ajo
Cebollas en cualquiera de sus formas, pueden impedir la producción de nuevas células sanguíneas de los felinos y como consecuencia tu gato puede padecer de anemia. Una porción pequeña de cebollas, cebollín y ajo no les hará daño, pero en grandes proporciones podría llegar a ser peligroso para nuestros gatos.
3. Leche u otras bebidas lácteas
¿Qué podría estar mal en ofrecerle a tu gato un poco de leche o un pedazo de queso? Al fin y al cabo eso es lo que comen todos los gatos que vemos en la televisión, ¿no? Sin que tú lo sepas, muchos gatos son intolerantes a la lactosa. Su pequeño y a veces frágil, sistema digestivo no puede, o no está hecho, para procesar alimentos lácteos. El resultado puede ser malestar intestinal para ellos o diarrea.
4. Alcohol
Cerveza, licor, vino, comida que contenga alcohol, entre otros. Ninguno de estos alimentos es adecuado para tu gato. El alcohol tiene el mismo efecto en los hígados y cerebros de los gatos que el que tiene en el de los humanos, pero recordemos que sus cuerpos son más pequeños y frágiles, así que el afecto del alcohol en su sangre puede ser mucho más peligroso para nuestros gatos.
Dos cucharadas de whisky podrían causarle un coma a un gato de 2 kilos y medio; y unas cucharadas más podrían llegar a matarlo. Así que, mejor prevenir y no exponerlos a bebidas alcohólicas.
5. Atún
Los gatos pueden parecer que son adictos al atún, sin importar si está enlatado para humanos o para ellos. Un poco de atún no hará daño, pero una dieta basada solo en comida enlatada, que no esté preparada especialmente para mascotas, puede hacerle daño a tu pequeño, ya que no le provee de todos los nutrientes necesarios para su adecuado desarrollo. Además, hay que tener cuidado, ya que mucho atún puede causarles intoxicación por mercurio.
Siempre recuerda que no porque tu gato se lo coma, quiere decir que sabe que es lo mejor para él. Tienes que cuidar a tu mascota como si fuese un niño pequeño y comprender que hay comida hecha para nosotros, y otra, producida especialmente para ellos; por lo que siempre habrá variadas opciones de donde escoger para darle lo mejor a tu mascota.
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