La alimentación es parte del entrenamiento de un ciclista. De hecho es una de las tres patas de un buen entrenamiento, junto con el descanso y los propios entrenos. Vamos a ver una serie de alimentos que todos los ciclistas deberían evitar consumir.
Bebidas alcohólicas
El alcohol va a aportar una gran cantidad de , es decir son calorías que van a transformarse directamente en grasa y que no tienen ningún valor nutricional. Por lo tanto habría que evitar su consumo.
Dentro de las bebidas alcohólicas también tendremos que diferenciar por graduación. En caso de ingerir alcohol lo ideal es tomar aquellas bebidas con poca graducación, como la cerveza o el vino.
Estas bebidas con poca graduación incluso son recomendables siempre y cuando su consumo sea moderado, ya que nos van a aportar muchas menos calorías que otras bebidas como el whisky, el ron o la ginebra y además son beneficiosas para la salud.
Refrescos azucarados
Uno de los alimentos con son considerados una lacra en nuestra sociedad por el consumo excesivo es el azúcar. Pues los refrescos azucarados tienen una gran cantidad de azúcar, por lo que su consumo se debe restringir al máximo.
Esta gran cantidad de azúcar que contienen se va a transformar en grasa si no lo quemamos rápidamente. Es mucho más sano beber una cerveza o una copa de vino que un refresco.
En el caso de que queramos algún refresco podremos optar por aquellos que no contienen nada de azúcar (los denominados zero o light).
Zumos de brick
A priori un zumo puede parecer un alimento muy natural. Y realmente lo es si es casero y hecho sólo con fruta. El problema es que los zumos de brick, al igual que los refrescos, tienen una gran cantidad de azúcar.
Además del azúcar llevan una gran cantidad de conservantes y aditivos. Si queremos tomar zumos lo mejor es que los hagamos nosotros mismos en casa con fruta.
Bollería industrial
La bollería industrial está compuesta principalmente por grasas saturadas. Este tipo de alimentos van a proporcionar un gran número de calorías en forma de grasa.
Son calorías con un escaso valor nutritivo, por lo que deberíamos restringir su consumo al máximo.
Salsas comerciales
También tenemos que tener mucho cuidado con las salsas preparadas que solemos consumir (kétchup, mostaza, mayonesa, etc). Este tipo de alimentos tienen en su composición un gran porcentaje tanto de grasas saturadas como de azúcar.
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