Uno de los problemas de uñas más habituales que he visto en chicas jóvenes (y a veces no tan jóvenes) es precisamente morderse las uñas. A veces han venido a pintarse las uñas conmigo chicas que se las mordían bastante. Digo bastante porque también las hay que prácticamente se las comen enteras, cosa que no comprendo, porque eso además de doler (te puedes hacer sangre) ¡afea las manos muchísimo! Y el gesto de morderse las uñas compulsivamente es super desagradable y da muy mala imagen.
Soy consciente de que morderse las uñas la mayoría de las veces no es un acto consciente y que muchas chicas se avergüenzan y no lo pueden evitar. O al menos eso se quieren hacer creer, porque la verdad es que para dejarlo definitivamente se requiere mucha fuerza de voluntad. Se puede evitar, y se debe hacerlo. Pero además os voy a enseñar unos truquillos en este post que os van a servir para conseguirlo definitivamente. Eso si, para dejarlo hay qye estar dispuesta y querer, mentalizarse y sobretodo relajarse. Las tensiones y el estrés son nuestro enemigo.
Ayyyyyy ¡Nadie quiere que sus uñas tengan este aspecto! >_<
Si sigues los siguientes pasos te garantizo que dejarás de morderte las uñas. Son unos consejos infalibles, ¡pero hay que llevarlos a cabo!
1- Utiliza un esmalte de sabor amargo especial para no morderse las uñas, como el No More Bite.
Esto no es la panacea, no va a hacer que las dejes de morder porque por experiencia las que lo hace se acostumbra al sabor. Eso si, te va a avisar de cuando lleves el dedo en la boca inconscientemente. Cuando notes el mal sabor sabrás que estás haciendo algo que no debes y ahí es donde la fuerza de voluntad entra a hacer su trabajo, que es retirar la uña. Si eres de las que se muerde alrededor este líquido también te valdrá pues no es un esmalte en sí y se puede echar alrededor también.
2- Busca un sustituto.
Como el dejar de fumar, dejar de morderse las uñas no es fácil. Muchas veces el gesto está tan interiorizado que se hace sin darnos cuenta o cuando estamos nerviosas, sin nada que hacer. Un chicle puede ser de gran ayuda, jugar con un anillo o un colgante, apretar una pelota de goma… tener algo en la mano que nos evite llevarlas a la boca sin querer.
3- Empieza a cuidarte más las uñas.
Lleva una lima siempre contigo Mantén tus uñas bonitas y con un corte recto y limpio. Píntalas siempre que sea posible. Utiliza cremas y aceites especiales para cutículas, tendrás menos padrastros y las manos más suaves y bonitas.
4- Pide ayuda a familiares y amigos.
Si todo lo demás no es suficiente tus amigos y familia te ayudarán dándote un toque cuando intentes llevarte a la boca tu preciado tesoro. No debes agobiarte con esto. Concentrarse en la respiración a modo de ejercicio puede ser muy efectivo cuando veas que no eres capaz de controlar el gesto y alguien te lo recuerde. Querrás asesinarlo, eso seguro. Pero piensa que lo hace porque te quiere y se lo has pedido.
5-Motívate.
Visualiza tus uñas del futuro. Fíjate en las manos bonitas de tus amigas. Haz una carpeta con las manicuras más lindas de Pinterest, los nail arts, los esmaltes de uñas que te gustaría llevar. Obsesiónate con unas uñas perfectas y piensa en lo preciosas que van a estar tus manos luciendo anillos bonitos y con las uñas pintadas… ¡soñar es gratis!
Por último, si lo anterior no te ha resultado (porque no has seguido los pasos), mi consejo es que acudas a unas especialista en reconstrucción de uñas. Con acrílico o gel se pueden hacer maravillas y es muy probable que dejes de morderlas porque las uñas reconstruídas con estos materiales son duras y gruesas. Además podrás poner las uñas del largo que más te guste, son ideales si siempre soñaste con unas uñas largas y bonitas, siempre perfectas.
Y ya sabes, si te ha gustado esta entrada o te ha parecido útil puedes seguirme en:
(Echa un vistazo a mis tutoriales en HD)