5 consejos para tener la mejor sonrisa.

Desde la Clínica de Implante Dental Málaga Dr. Pablo Avilés os dejamos 5 útiles consejos para mantener una sonrisa en perfectas condiciones.

1. Ir al dentista regularmente. Visita al odontólogo al menos una vez al año. Después de la consulta, el dentista te recomendará más o menos visitas de acuerdo al estado de tu salud bucal o te remitirá con algún otro especialista.

En estas revisiones el dentista no sólo mirará si tienes caries o gingivitis, sino se asegurará de que cuentes con una salud bucal completa, es decir, que no existan otro tipo de problemas y enfermedades.

 2.- Baja el consumo de carbohidratos. ¿Sabías que los gérmenes que habitan naturalmente en la boca utilizan el azúcar y el almidón de los alimentos para producir ciertos ácidos, los cuales destruyen la capa externa de los dientes? Con el tiempo aparecen las caries, perforaciones en los dientes que pueden llegar a ser muy dolorosas. Aumenta el consumo de alimentos ricos en calcio.

3.- Cepillado tres veces al día. De aquí vienen los problemas principales. La gingivitis se produce por la acumulación de placa y, si no se trata, puede avanzar hasta una periodontitis. Ésta infección puede provocar hasta pérdida de dientes.

Los dentistas recomiendan el lavado de dientes tres veces al día –después de cada comida. Cuando cepilles tus dientes hazlo por lo menos durante 2 minutos. No olvides cepillar también lengua y paladar. Fundamental cambiar el cepillo cada 3 meses. Ideal no fumar..

4.- Uso del hilo dental. Muchos pacientes que tienen gingivitis no usan el hilo dental por miedo a que les sangren aún más las encías.

Sin embargo, un estudio realizado por expertos comprobó que cuando la higiene bucal incluye el cepillado de dientes y el uso de hilo dental, se disminuyen las encías sangrantes en un 38%.

5.- Acudir urgentemente a tu dentista si por más de 2 semanas:

-Tus encías sangran con asiduidad
-Observas parches rojos o blancos en tus encías, lengua o debajo de ella
-Padeces un dolor persistente en boca o mandíbula
-Tienes llagas que no sanan
-Tienes dificultades para tragar o masticar
-Tienes una elevada sensibilidad dental a los alimentos muy fríos o calientes