5 Consejos para un bronceado perfecto

Muchas y muchos queremos un bronceado perfecto. Basta decir que un bonito bronceado no está reñido con utilizar factor de protección, es fundamental. Pero también hay otros factores que entran en juego para que tengamos un moreno más duradero y luminoso ¿Te lo explico?

Exfoliación 

Lo ideal para que el bronceado quede uniforme y sin manchas, es realizar una exfoliación corporal y facial, previa a la temporada de sol.  Es recomendable hacerla al menos 3 días antes de exponerte, para evitar quemaduras solares. Además, al realizarte un peeling, los productos cosméticos que apliques se absorben con mayor facilidad.
¿Como hacerlo? Te aconsejo que vayas a un salón de belleza para realizarlo, pues te lo harán a la perfección. En casa puedes mantenerlo, haciendolo una vez por semana cuando estés en la ducha.

Frutas ricas en betacarotenos

La alimentación es fundamental para que la piel se vea sana y con luminosidad. Por eso, si comes frutas y hortalizas ricas en betacorotenos tu bronceado permanecerá por más tiempo, pues estimula la melanina, responsable del color.  Ante la duda, son aquellas de color naranja: melocotones, naranja, albaricoques, zanahoria, calabaza...

Suplementos alimentarios

Protegerse con un factor de protección solar es lo primero que debes hacer para adquirir un bronceado gradual. Sin embargo, también te puedes ayudar con suplementos, más conocidos como cosmética oral.  Ayudaran a que tu piel se haga más resistente al sol y el tono de tu piel sea vea más bonito.
¡Ojo! No sustituyen al filtro solar.

Moderar la exposición al sol

No porque estés más horas, vas a tener un color más bonito. Al contrario, si estás 8 horas en las playa, cosa que no es recomendable, tu piel sufre un mayor desgaste y con consecuencias como un envejecimiento prematuro.
Lo mejor es que tomes el sol de forma progresiva, de menos a más tiempo según empieces tu temporada de exposición solar y evitas las horas más fuertes (de 12 a 16 h).

Hidratación

Hidratar por dentro y por fuera es la clave para que la piel mantenga sus niveles óptimos de agua. Hidrata mucho tu piel después de tomar el sol, con cremas ricas y reparadoras. Pero no te olvides también de beber agua, unos 2 litros al día, pues en verano es frecuente la deshidratación.Si lo haces, tu piel estará hidratada, jugosa y con más luz. 
Una piel deshidratada puede conllevar a futuras manchas solares.

Cuéntame si conocías estos sencillos consejos  ¿O te unes a otras pautas para conseguir un bronceado de 10?