Decorar escaleras es una práctica que no se estila demasiado. Nosotros proponemos cinco maneras de cambiar tu escalera.
Las dos primeras opciones son variantes de un mismo concepto. Además, se puede aplicar de diversas maneras. La idea es pintar los escalones de colores. Éstos se pueden pintar en su totalidad o únicamente la contrahuella (muro horizontal). Si queréis complicar todavía más el trabajo, existe la opción de realizar una pintura entendiendo la pintura en plano vertical. Este segundo modelo es realmente arriesgado, y no conviene apelar a él si no se tiene claro qué se pretende conseguir. Si os digo la verdad, el modelo de la galería me parece bastante horrible.
Pasemos a ideas más sencillas y -según yo lo veo- viables desde un punto de vista estético. Las frases o citan siempre son garantía de éxito, ya sea en los cabeceros de la cama, en los muros de la cocina y por qué no, en las contrahuellas de la escalera. Es una implementación poco invasiva con el entorno estético y desde la lejanía arroja un matiz sutil.
Ese mismo proceso de añadir frases lo podemos llevar a cabo con la pintura de pizarra. Posee un extra muy a tener en cuenta para los más pequeños, y también ofrece la posibilidad de variar en función del estado de ánimo o de mensajes que quieras mandar de forma original. Ah, y si diseñas un muro con todos los escalones puedes corregir durante el proceso.
Finalmente, una variación que resulta hasta simple después de los pasos recorridos hasta llegar aquí. Si tú no eres de letras...siempre te quedarán los números.
No te pierdas la fantástica galería.
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