¿No os ha ocurrido de encontraros alguna vez con películas que no terminan de ser todo lo buenas que os habría gustado? Pero sin embargo, como una pepita de oro, estas películas guardan un momento, una escena en sus entrañas que os ha emocionado como pocas.
Esta es mi particular selección de algunas de esas películas, que quedándose quizás a medio camino de la grandeza, tienen, sin embargo escenas muy emotivas. No está cerrada y no descarto seguir añadiendo nuevas películas, ¿cuál añadiríais vosotros?
Y ahora sí:
3. 2, 1... ¡Acción!
1. Rocketman, el concierto de los sueños
La verdad, la película me gusta mucho. Me parece el mejor biopic que he visto, lleno de emoción y de honestidad. Me suena auténtico todo lo que veo, y la música de Elton John... ayuda. Como en esta escena en la que un Elton John niño imagina un concierto del futuro ¿quién no ha soñado con un mañana victorioso? y de ahí pasamos a un fundido en el que se ve confrontado con la dura realidad, un largo camino ay, el de los sueños hasta volverse reales, aunque hay quien se atreve a cruzarlo...
2. La Vida Secreta de Walter Mitty, Ground control to Major Tom...
Ya hablé de esta película en una entrada. Creo que es visualmente muy bonita y con algunas ideas muy interesantes. Y hasta ahí. Pero hay un momento, en el que el protagonista se debate entre la llamada a la aventura y seguir en el mundo ordinario y seguro, que es sinceramente magistral. El montaje de la escena, la forma en que la música de Bowie acompaña al personaje, el salto de fe final...Wow.
3. Una historia casi divertida, under pressure
Es una película que casi nadie conoce, y me pregunto por qué. Quizás porque hay una mezcla de géneros que no acaba de estar bien decantada. Resulta adulta para ser adolescente y algo juvenil para ser adulta. Ay, amigos, pero ¿qué me decís de esta escena? El protagonista se ve conminado a cantar al frente de sus compañeros y de pronto una banda de gente un poco lunática y desafinada se convierte, bajo presión, nada menos que en Bowie y Queen versión hospital psiquiátrico.
4. Buñuel y la Mesa del Rey Salomón, Lorca entre amigos
La película es una locura. Y mira que admiro a Carlos Saura (le debo un par de entradas aquí), pero no hay por donde cogerla. Eso sí, esta escena es pura emoción. Lorca asiste a un homenaje inesperado, más allá del tiempo y del espacio, en una tabernilla, de manos de Estrella Morente cantando los cuatro muleros. La magia del cine es esto. Piel de gallina.
5. Stranger Things, temporada 4 No dejes que los demonios te venzan
Vale, lo reconozco, no es una película, es una serie. Pero chicos, no me negaréis que la temporada 4 de ST es puro cine... concretamente ese cine que igual solo existe en nuestra imaginación, la de la generación en los ochenta, y que estaba hecho de pura fascinación (ET, Los Goonies, La princesa prometida...). Además esta escena es un prodigio de arte cinematográfico, el montaje, el tempo y la maravillosa canción de Kate Bush, de la que ya hablé.
Max está peleando por su alma, y la única forma de hacerla regresar a nuestro mundo es haciéndola escuchar su canción favorita con la esperanza de que recuerde quién es y donde están sus amigos, esperándola.
Ahora es vuestro turno, ¿qué escenas de películas os han gustado más? Os leo.