Ayer os medio contaba la crisis blogueril que he tenido en las últimas semanas y hoy me pongo a tope a buscar espacios propios donde poder trabajar en casa. Si es que no hay quien me entienda. Son épocas de esas que ni yo misma acabo de aclararme :) Estoy, como ya os decía ayer, con las pilas cargadas. Eso hace que por un lado tenga muchas ganas de comenzar los proyectos que tengo sobre la mesa, y por otro, con necesidad loca de cerrar otros que empecé hace muuuucho tiempo. Uno de ellos es la "operación zafarrancho" (o lo que se traduce en la misión imposible de poner en orden un taller en casa para centralizar todo lo del blog... Eso es: manualidades, decoración extra, mesa, ordenador, pinturas, herramientas y demás trastos asociados...) que parece no tener fin. Cuando medio consigo meterlo todo en la habitación y que esté un poco ordenado, una nueva oleada de trastos llega a casa... ansiedad-ansiedad-ansiedad... (hace nada me llevé una puerta antigua de un contenedor que estoy deseando enseñaros con el tutorial correspondiente!!!!! Emoción puraaaaaa!!!!).En fin, aprovechando que septiembre ya está aquí, anoche estuve rondando blogs y un rato en pinterest y encontré ideas para mesas de trabajo (así consta y queda claro que tengo ganas de ordenar el caos, eh?? la intención que no falte) sin estar en despachos propiamente dichos. Es decir, no necesariamente tenemos que reservar una habitación de la casa para ese uso exclusivo. En realidad, cada día estoy más a favor de que los espacios sean multifuncionales. El dormitorio, no tiene por qué ser solo para la noche; la cocina no es solo para cocinar y comer rápido; los pasillos pueden ser lugares donde crear un rincón de lectura... En fin. Imaginación y creatividad para vivir nuestras casas, verdad?