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5 interrogantes de los Cowboys para la Temporada 2018

Publicado el 12 julio 2018 por Primeroydiez @Primeroydiez
5 interrogantes de los Cowboys para la Temporada 2018

Los Dallas Cowboys normalmente generan expectativas y dan de qué hablar durante el offseason y esta temporada no es la excepción.

Tras un año en el que se quedaron cortos de calificar a Playoffs y con el caso de la suspensión de Ezekiel Elliott acaparando demasiada atención, se espera que en esta ocasión, con un equipo renovado y sin la mayoría de sus veteranos más identificables (Jason Witten y Dez Bryant entre ellos), los Cowboys abracen una nueva identidad y sigan el rumbo que comenzaron a trazar en 2016.

Estas son 5 interrogantes de los Cowboys para la Temporada 2018.

¿Es Dak Prescott el futuro en la posición de QB?

Es cierto que el equipo tuvo gran éxito hace dos años con él bajo el centro, pero en 2017 su nivel de juego pareció bajar cuando la ofensiva se recargó más en él ante la ausencia de Elliott por suspensión y ciertas lesiones en la línea ofensiva. La precisión de sus pases no fue la mejor y por momentos parecía temeroso de lanzar más allá de 10 yardas.

Este año es el tercero de su carrera, con un nuevo coach de posición (Kellen Moore), pero bajo el mando del mismo coordinador ofensivo (Scott Linehan). No podemos olvidar que no sólo está jugando bajo su contrato de novato, sino que se trata de un seleccionado en la cuarta ronda del Draft, por lo que en este momento es realmente barato para el equipo. Su desempeño en esta temporada será clave para determinar si el equipo quiere comprometerse a largo plazo con él y extender su contrato durante su último año de vigencia en 2019.

Parece que en esta temporada el equipo se recargará fuertemente en el juego terrestre y eso podría jugar a favor de Prescott, pero inevitablemente existirán situaciones en las que el equipo requiera confiar en su brazo para ganar partidos y serán esos los momentos definitivos.

¿Quién será el receptor principal del equipo?

La salida del receptor estelar Dez Bryant fue una de las historias más sonadas del offseason, seguida de cerca por el retiro de Jason Witten, dos movimientos que dejaron al equipo con esta tremenda interrogante. Terrance Williams y Cole Beasley son las piezas con mayor experiencia en el equipo y siendo sinceros, esa combinación está lejos de imponer respeto a las defensivas.

A lo largo de la Agencia Libre y durante el Draft, el equipo realizó movimientos para reforzar la profundidad de la posición. Los más notables fueron la adquisición de Allen Hurns proveniente de Jacksonville y la selección de Michael Gallup en la tercera ronda del Draft. Adicionalmente realizaron un intercambio para hacerse de Tavon Austin, ex de los Rams. Con este puñado de jugadores, más otros tantos en el depth chart, Dallas buscará que alguno de ellos dé un paso al frente como el líder en el juego aéreo, aunque de momento el lanzar el balón luzca sólo como un complemento del ataque terrestre.

¿Puede la línea ofensiva regresar a ser dominante?

Con tres jugadores considerados entre los mejores en su respectiva posición en toda la liga en Travis Frederick, Zack Martin y Tyron Smith, complementados por otros jugadores de buen nivel, en los últimos años la línea ofensiva de los Cowboys ha sido un estándar de calidad.

El problema es que las lesiones de Smith, los constantes cambios de posición de La’el Collins y la brecha de talento entre titulares y reservas, han hecho que, por momentos, este grupo que puede ser la fortaleza más grande del equipo se convierta en una gran debilidad.

Para 2018 los Cowboys darán continuidad a Collins como tackle derecho y esperan haber encontrado al eslabón faltante en Connor Williams en la segunda ronda del Draft para ser el nuevo guard izquierdo. Con esa alineación todo será cuestión de repeticiones en conjunto y mantener buena salud para que este grupo permanezca siendo dominante por los próximos cinco años.

5 interrogantes de los Cowboys para la Temporada 2018

¿Puede Ezekiel Elliott liderar la liga en yardas por tierra?

Con un talento evidente y con una línea ofensiva como la ya mencionada, las expectativas que Elliott debería cumplir no pueden ser menores. En 2017, con sólo diez partidos jugados se quedó a sólo 17 yardas de alcanzar las 1 000 por tierra, promediando más de 98 por partido, además de haber conseguido 7 touchdowns, esto sin mencionar las 269 yardas y 2 TD que sumó atrapando el balón.

Para este año, ya sin la distracción que implica un juicio, una suspensión por parte de la liga y con la cabeza puesta únicamente en el juego, su impacto podría ser monstruoso en una temporada en el que enfrentará a pocas defensivas de élite.

¿Podrá la defensiva secundaria consolidarse?

Uno de los puntos más débiles que los Cowboys han arrastrado durante años ha estado en el perímetro defensivo, sin embargo últimamente se han destinado gran cantidad de recursos a mejorarlo y parece que la tendencia es positiva.

En un cuadro integrado por Chidobe Awuzie, Jourdan Lewis, Anthony Brown, Byron Jones, Xavier Woods y Jeff Heath, entre otros, lo que impera es la juventud y el tremendo potencial, sin embargo falta una pieza que brinde certeza, experiencia y liderazgo. Este elemento podría surgir de alguno de los mencionados que lleve su juego al siguiente nivel o incluso en un potencial cambio por Earl Thomas, que hasta el momento sigue siendo parte de los Seahawks.

Otra pieza de suma importancia que se agregó en este offseason está en la figura de Kris Richard, quien ahora se desempeña como Coordinador de Defensiva por Pase y Coach de Defensive Backs. Richard no es otro que el coach que guió a la llamada Legion Of Boom de Seattle en sus mejores años, ascendiendo desde coach de posición hasta coordinador defensivo de 2015 a 2017. Su llegada a los Cowboys podría tener un impacto muy positivo en los jóvenes y le daría una razón más a Earl Thomas para querer jugar con una estrella en el casco.


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