Los Packers son uno de los mejores equipos de la liga, y mientras Rodgers esté sano, tienen chance de ganar el Super Bowl. Lo que está logrando este quarterback, en cuanto a efectividad, precisión y producción no tiene precedentes. La última vez que le interceptaron en el Lambeau fue en el 2012, pero de cualquier manera fuera de casa limita sus intercepciones y fumbles. Este domingo no fue diferente, ya que al enfrentarse a un equipo muy a la baja como los 49ers, no fue ninguna sorpresa la victoria por 17 – 3. Te presento los 5 puntos de la victoria de los Packers ante los 49ers
1.- Rodgers cementa su título de mejor quarterback de la liga actualmente.
Además de Tom Brady, Rodgers está rompiendo la liga. Con todo y que no tuvo su mejor partido y lo limitaron a 224 yardas y solo un touchdown, Rodgers sigue siendo sumamente efectivo con cada oportunidad que tiene bajo centro. Si ves su video, algo impresionante que tiene es que no solo es un buen quarterback siguiendo el guión de la jugada: leyendo su primer, segundo y hasta tercer read, que es lo que hace grandes a quarterbacks como Brady o Manning. Rodgers tiene un sentido de improvisación que pocos tienen en la historia, y con sus piernas logra alargar las jugadas y siempre encontrar a un receptor abierto. Es de los quarterbacks más completos que he visto y tiene una dimensión extra que no todos los mejores de la historia tienen. Podemos ver un buen ejemplo de esta habilidad cuando encontró a su ala cerrada para touchdown en la primera anotación.
2.- La salud de Eddie Lacy es muy importante para los Packers.
Lacy tuvo 90 yardas corriendo el balón con solo 18 acarreos, lo cual le da un promedio de 5 yardas por acarreo, algo que siempre ayuda para abrie el juego aéreo, y más si tienes a Rodgers lanzando el balón. La salud de Lacy es vital para este equipo, ya que es un corredor poderoso, con buena visión de campo y también cacha muy bien el balón. Vimos claramente como Rodgers se percataba cuanto James Jones o Montgomery están cubiertos hombre a hombre, sin ayuda de un safety o linebacker, y explotaba ese “matchup”.
3.- Colin Kaepernick no es un QB capaz para la NFL.
Al menos hoy por hoy, Kaepernick no puede ni debe liderar a un equipo de la NFL con la responsabilidad de ser su quarterback. El problema de lectura de defensivas lo sigue mermando, así como la precisión de sus pases. Su “football IQ” o inteligencia para visualizar el juego es baja, y no ha sido tampoco un líder importante para su equipo. Sabemos que el talento físico lo tiene, pero no ha podido desarrollarlo para ser eficiente.
No puedes esperar el ganar un partido con 160 yardas y una intercepción, partido en el cual también se veía desesperado dentro de la bolsa y de nuevo olvidó seguir sus lecturas de receptores una por una. Tuvo éxito con sus piernas, pero en esta liga si no eres un quarterback productivo dentro de la bolsa no vas a poder tener éxito.
4.- El grupo de receptores de San Francisco tampoco ayuda a Kaepernick.
McDonald tiró un pase crítico para un primero y diez, Boldin ha tirado varios pases importantes desde el año pasado y Torrey Smith no ha podido estirar el campo lo suficiente con sus rutas largas. Además, la creatividad ofensiva ha sido muy pobre, y ni hablar de la productividad de todos los jugadores de esa unidad. Hasta Hyde, que había sido el único jugador productivo, tuvo un mal partido contra Packers, lo cual habla de que nada más no pueden lograr lo que se han plantado, y tienen que buscar una personalidad ofensiva.
5.- ¿Tomsula será la respuesta?
La defensiva aguantó bien a Rodgers y compañía, y se vio mejor que otros partidos, pero la verdad es que el equipo no está funcionando como un todo. Están desmotivados, faltos de creatividad, desincronizados y sin orden. El equipo no tiene personalidad, y de eso tiene mucha responsabilidad el coach. Veremos si pronto Jed York no se arrepiente por correr a Jim Harbaugh, un gran entrenador que siempre tiene a sus equipos con una personalidad clara y un enfoque determinado y específico. Muchos jugadores se quejaron de que Harbaugh no los trataba bien, pero de verdad, ¿la respuesta es un coach al que todos quieran? Este es un claro ejemplo de que no siempre te tiene que caer bien tu jefe mientras sea un buen líder y haga bien las cosas. La realidad es que a Tomsula le han quedado grandes los zapatos de Harbaugh.