En este artículo hablaremos sobre las partes de la instalación eléctrica que se reparan con más frecuencia. Este material eléctrico y su correcto funcionamiento se han convertido en partes fundamentales de la vivienda y de nuestra comodidad, y de nuestro ahorro.
Hablaremos sobre todas las partes de la instalación interior de la vivienda, desde el cuadro eléctrico hasta los puntos de servicio. Vamos allá.
Cuadro eléctrico
En viviendas antiguas, incluso hasta el año 2002, el cuadro eléctrico tenía una serie de carencias, que se han ido cubriendo y este elemento ha ido evolucionando a medida que tenemos mayor consumo eléctrico. La adaptación del cuadro eléctrico debe de tener en cuenta estos pasos:
- Desconexión eléctrica: Si hemos detectado que nuestro cuadro de protecciones se nos a quedado limitado y queremos ampliarlo o sustituir las protecciones por otras nuevas, lo primero que tenemos que hacer es desconectar la protección general o IGA. Así nos aseguramos de no tener presencia de tensión en ninguna protección.
- Quitar la protección y el cableado: Una vez no tengamos tensión, quitaremos el el cuadro o alguna de sus partes que queramos sustituir por el nuevo, debemos respetar el cableado tal y como está siempre que cumpla con los requisitos, por lo que debemos de desconectar y conectar en el nuevo igual que estaba. Aquí es importante que cuentes con un profesional, porque es un punto delicado de la instalación. Podrías aventurarte con el siguiente apartado. Vamos a ver.
Terminales y enchufes
Son los elementos que más sufren. Su uso excesivo puede provocar la rotura, sobrecarga o sobrecalentamiento de los enchufes. Aunque solemos esperar a que se rompa alguno, los enchufes, como el resto de mecanismos eléctricos del hogar, hay que revisarlos con frecuencia. Cuando encontramos que alguno está deteriorado (por presentar deformidades, un color extraño o negruzco) debe cambiarse inmediatamente por seguridad.
Los enchufes son la parte más significativa de la instalación eléctrica de una casa. Antes de ponerse manos a la obra se deben conocer las partes que conforman un enchufe convencional:
- El marco del enchufe: es la carcasa más externa, el recuadro superficial que queda a la vista en la pared. Suele ir colocado a presión. Esta parte es la más intercambiable y personalizable. Puedes buscar el fabricante y buscar embellecedores que te ayudarán a renovar la imagen de la instalación.
- La cubierta central: es el embellecedor o tapa del mecanismo que tiene los orificios para introducir las clavijas. Hay modelos en los que el marco y el embellecedor van integrados en el propio enchufe. Esta cubierta protege y esconde el mecanismo eléctrico y va fijado con tornillos. En este punto ya debes de tener en cuenta que deberías de tener cortada la línea, antes de meterte a cambiarlo.
- El mecanismo eléctrico: es la base y la parte interna del enchufe; es la estructura metálica donde se conectan todos los cables. Es un punto delicado, en el que si la caja base no está correctamente tomada a la pared, tendrás que prepararte un poco de yeso y asegurar la caja. Si lo vas a hacer tú en casa, asegúrate de que las cajas estén fijas a la pared, o tendrás que ser electricista – albañil – pintor.
Circuito independiente, horno, termo, lavavajillas
Si vas a instalar algún elemento nuevo, como una nueva cocina eléctrica, un horno, o algún aparato que requiera una única línea de cable desde el cuadro debes de considerar aquellos elementos de control o elementos de protección automática requeridos para ese aparato. Estos últimos generalmente no pueden ser manipulados por el usuario. Estos dispositivos pueden existir, pero en los cuadros eléctricos anteriores a 2002 e incluso en muchos cuadros eléctricos posteriores lo que siempre van a existir son interruptores manipulables. Estos interruptores manipulables son lo que se conoce generalmente como un P.I.A. (Pequeño Interruptor Automático).
mindseye3d.comIluminación
Cuando renovamos la imagen de una vivienda acostumbramos a retocar toda la instalación de iluminación. Los pocos conceptos que debes de considerar, para conseguir cuando menos una buena iluminación son:
- No olvides aprovechar la luz natural
- Planifica los espacios, zonas de día, zonas de noche, de descanso, de lectura, usos específicos…
- Temperatura de color de la luz. La temperatura de luz blanca más cómoda para la vida diaria es la comprendida entre los 2700 y los 3000 K. De ahí hacia abajo es luz cálida, y de ahí hacia arriba luz fría. Dependiendo del uso podrás jugar con la temperatura de color, ojo, no tiene que ver con la potencia de la luminaria.
- La luz indirecta te ayudará para tener una iluminación relajada y evitar sombras en el caso de tener una luz general.
- Con la nueva tecnología de iluminación LED ahorrarás muchísimo dinero en consumo mensual, sobre todo si estudias detalladamente los diferentes escenarios.
Domótica
Los servicios de control y gestión de la energía se encargan de racionalizar los consumos en base a los diferentes criterios, como la potencia contratada, tarifas, etc…
Como ejemplo, nombramos los siguientes:
- Desconexión selectiva de cargas eléctricas. Con esto se puede abaratar el recibo de la electricidad (término de potencia), a tiempo que se consigue incrementar la seguridad de la instalación.
- Programación de la puesta en marcha de receptores cuando se aplica la tarifa más barata.
- Calefacción y aire acondicionado por zonas. De esta forma se consigue un mayor confort, el aprovechamiento óptimo de los recursos y se inhabilita la climatización dentro de unos horarios y zonas no habitadas. También se puede incorporar el control de contradicción, cuando se abre una ventana, la climatización se desconectará automáticamente, volviendose a conectar cuando se cierre la ventana.
- Alumbrado exterior en función de la luminosidad y la presencia. Así se evita la conexión del alumbrado cuando haya luz natural y cuando en zonas de acceso controladas no se detecte presencia.
- Lectura remota de contadores, evitando las visitas domiciliarias.
- Información de cosnumos , costes, horarios de tarifas, etc…
- Utilización de fuentes de energía alternativas ante imprevistos (solar, eólica…)
Las estimaciones sobre el ahorro energético que se puede obtener gracias a la domotización del hogar son del 26%. La instalación de un sistema domótico, viene ligado con un ahorro energético considerable.
La luz y los combustibles son tres partidas económicas que se ven reducidas de forma drástica en el presupuesto doméstico, ya que pasan de usarse de una forma indiscriminada a ser empleadas ajustándose a las necesidades reales que tienen los habitantes de la vivienda.
“Agua, luz y combustibles son tres partidas económicas que se ven reducidas de forma drástica con la domótica”
El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDEA) aporta datos esclarecedores sobre la importancia de contar con un hogar eficiente. En el caso de un aparato de aire acondicionado, un solo grado de diferencia respecto a la temperatura ideal puede significar un aumento del gasto de energía de entre el 8% y el 10%.