Cuando tenemos una relación amorosa con alguien y nos sentimos enamorados podemos experimentar distintos sentimientos. Esa alegría cuando le vemos, la felicidad que nos produce solamente pensar en el ser amado, estar cerca o simplemente un mensaje donde se reporte, sentimos ternura, amor en su máximo esplendor y más.
Esos son los sentimientos positivos, pero si además tenemos inseguridad o creemos -inconscientemente- que lo que estamos viviendo es demasiado bueno para ser verdad, también somos capaces de sabotearnos a nosotros mismos con actitudes poco favorecedoras para la relación. Para que una relación amorosa tenga éxito, es necesario que ambas partes tengan un buen concepto de sí mismas. Si consideras que tu autoestima no está en un buen momento ahora, aprende en cómo levantarla.
Si por el contrario consideras que tanto tú como tu pareja tienen una autoestima saludable, pero de igual forma siempre te está acusando de tener problemas de celos, a continuación puedes leer algunas señales que te indican que ese reclamo que te está haciendo el otro puede ser cierto, y sea momento de empezar a hacer algunos cambios.
¿Qué son los celos?
Los celos son miedo a que la persona con la que tienes un vínculo sentimental pueda sentirse atraída a alguien más y peor aún, actúe en base a esos sentimientos y termine dejándote. También se pueden definir los celos como los sentimientos de amenaza que experimenta una persona porque cree que alguien que considera "propio" podría dejar de serlo.
Una de las principales señales de alarma que te descubren como un celoso empedernido es pensar que siempre tienes la razón y tus dudas están bien fundamentadas. Así que trata de dejar eso a un lado, para tener la mente abierta y leer objetivamente lo siguiente:
Señales que indican que tienes demasiados celos.
Se pueden sentir celos hacia los amigos, familia y por supuesto, hacia nuestra pareja sentimental. ¿No te consideras celoso pero los demás te lo dicen todo el tiempo? Quizá es momento de saber si están exagerando, o de verdad estás teniendo comportamientos dignos de una persona demasiado celosa:
-Los celos a veces te llevan a hacer cosas de las que luego te arrepientes.
Todos hemos sentido celos en algún punto de nuestras vidas, eso nos demuestra que estamos vivos y que amamos. El problema es cuando estos celos empiezan a afectar tu relación con las otras personas ya que forman parte de tus reacciones comunes.
si por celos has hecho cosas de las que te arrepientes luego (como gritarle a la persona que amas, golpear a tu pareja o a un tercero, romper cosas, pasar vergüenza, entre otros) ya no estamos hablando de celos "normales", sino de algo que se salió de control, porque si te arrepientes quiere decir que desearías no haberlo hecho, pero igual lo hiciste, así que no tuviste autocontrol en ese momento.
-Revisas el celular de tu pareja o sus perfiles en las redes sociales.
Si sientes la necesidad de revisar las conversaciones privadas de tu pareja y obtuviste de alguna manera sus contraseñas en las RRSS, quiere decir que algo no está bien en la relación. Ese comportamiento indica que existe falta de confianza, es decir, no confías en que tu pareja esté contigo solamente y necesitas averiguar si hay un tercero y de quién se trata.
Hay un refrán que dice "el que busca encuentra" y en el caso de los celos, si revisas las redes sociales o el teléfono de tu pareja eventualmente encontrarás algo que te hará enojar, así sean cosas insignificantes como:
Que no tienen en realidad el potencial de poner en peligro tu relación, pero tú los tomas muy en serio.
-Le prohíbes a tu pareja usar ciertas prendas de vestir.
La ropa forma parte de nuestra personalidad y cómo nos expresamos, ya que con ella le decimos al mundo cómo queremos que este nos vea. Por esta razón no es necesario controlar los atuendos de tu pareja. Si te sientes en la necesidad de hacerlo es porque no sientes la confianza que deberías.
Uno de los pensamientos más comunes en un celoso obsesivo es que si su pareja sale vestida de tal o cual forma le mirarán más y por ende terminaría dejándole por alguna de las personas a quien cautivó con su manera de vestir.
Si definitivamente sientes que la ropa de tu pareja no es apropiada para una ocasión, hazlo saber con discreción, conversando y sin molestias, si no te presta atención no tiene sentido molestarte, es su forma de expresarse y debes respetarlo. Por otro lado, si ha hecho un cambio repentino en su forma de vestir en comparación a cuando empezaron a salir y no estás dispuesto a aceptarlo, no vale de nada hacer una escena de celos, sino hablar al respecto y tomar las medidas que sean necesarias.
-Desconfías de todo el mundo.
Es cierto que tu pareja es atractiva, a ti te atrajo, pero cuando empiezas a desconfiar de cualquier persona que se le acerque y a crear historias de tu pareja con cada uno de ellos, es una señal alarmante. No solo te quita tu paz, sino que además trae graves problemas en tu relación.
Si comienzas a prohibirle a tu pareja que vea a sus amigos(as), que deje de asistir a los lugares que le agradan porque sospechas de los que están ahí. O, aunque no lo prohíbas te descubres molestándote y sospechando de que hay "gato encerrado" cuando te dice que irá al gimnasio, cafetería, supermercado u otros lugares cotidianos sin tu compañía, estás experimentando un nivel de celos más allá del saludable.
-Te ves en la necesidad de monitorear las actividades de tu pareja.
Si te dice que va al cine con su familia o amigas tratas de corroborar eso de todas las maneras posibles. Incluso has pensado en adquirir un equipo de GPS para su automóvil así puedes saber en todo momento dónde se encuentra y poder investigarle más a fondo.
Esto no demuestra una falta de confianza increíble sino una dependencia preocupante hacia la otra persona. Si sientes que debes corroborar sus historias porque crees que te miente constantemente, en vez de agotarte física y mentalmente con estas actividades, es preferible que busques ayuda al respecto.
Los celos enfermizos no solo le hacen daño a la relación amorosa, sino que también te hacen daño a ti porque puedes caer en un patrón que se repita en todas tus relaciones. Lo sano en este caso es buscar la raíz de esta falta de confianza propia y en el otro. Muchas veces superar esto a solas es bastante complicado, así que es una buena idea pedir ayuda profesional. Si crees que la terapia es muy costosa o que no te encuentras en un buen momento económico para invertir en ella, aprende cómo ganar un dinero extra .
Al empezar a trabajar en ti mismo estarás en mejores condiciones para estar en una relación feliz y saludable donde ambos crezcan en todos los aspectos.