Islandia no ha destacado especialmente en el terreno de la televisión, pero esta temporada ha destacado especialmente gracias a la repercusión del producto estrella de la televisión pública, incluso fuera de sus fronteras. Este thriller gélido consiguió captar la atención de más de un millón de espectadores en BBC4 y de 5 millones en su estreno en France 2, y hasta los hermanos Weinstein adquirieron los derechos para su distribución en Estados Unidos. Trapped juega con los recursos habituales del género, desplegando las sospechas en diferentes personajes y desgranando en cada capítulo nuevas líneas de investigación, que conectan un hecho dramático del pasado con la investigación en el presente. Como últimamente hemos visto en series como Broadchurch (2013-), la tendencia del género policíaco pasa por involucrar directamente al protagonista en los hechos que se investigan. Y aquí, el policía de un pequeño pueblo islandés, atrapado por una tremenda tormenta de nieve, también sufre en sus propias carnes el azote emocional de sus indagaciones. Trapped, al margen de estar construida a la perfección, tiene ese aire a Fargo (2014-) que nos llama la atención desde el principio, con un protagonista que esconde tras su gran fisonomía una humanidad sin fisuras (excelente el actor Olafur Darri Ólafsson, al que veremos pronto en Mi amigo el gigante, de Steven Spielberg). El responsable de la serie es el islandés Baltasar Kormákur que viene trabajando desde hace años en Hollywood, dirigiendo policíacos como 2 guns (2013) o produciendo filmes de aventuras como Everest (2015). Música: La banda sonora es otro de los aspectos especialmente cuidados de la serie. No en vano se ha recurrido al compositor más internacional del país, Jóhan Jóhansson (nominado al Oscar por Sicario (2015)) para crear el tema principal, mientras que la música incidental la firma el cellista Hildur Guđnadóttir, que consigue crear una glacial atmósfera de misterio y tensión.
Okkupert (2015-)Jo Nesbø, Karianne Lund para TV2
Esta serie ya venía precedida de un récord como la producción televisiva más cara de la historia de Noruega, con un presupuesto de 90 millones de dólares. Basada en una idea original del novelista y guionista Jo Nesbø (autor de la novela en la que se basó el excelente policíaco Headhunters (2011)), el argumento nos introduce en una trama de política ficción que plantea una ocupación de Rusia en Noruega, apoyada por la Unión Europea, y plantea interesantes reflexiones sobre la posición de los países nórdicos frente a la UE. Convertida en uno de los grandes éxitos de la última temporada, Okkupert maneja con soltura los resortes del entramado político, y consigue crear un estado de ocupación "pacífico" que plantea dudas sobre las consecuencias de una probable guerra económica moderna. Por supuesto, a los rusos no les hizo nada de gracia, y hasta el embajador ruso en Noruega manifestó su repulsa ante una serie que olvidaba la importante contribución del ejército soviético a la liberación del Norte de Noruega de las fuerzas de ocupación nazis. En todo caso, sí es cierto que la serie utiliza ese sentimiento de cierta animadversión que existe desde los países nórdicos hacia la Europa del Este (especialmente a la Rusia de Putin), para construir un discurso provocador que no tiene por qué gustar a todo el mundo. La serie está producida por la filial noruega de la productora sueca Yellow Bird, responsable de las adaptaciones al cine de las novelas de Stieg Larsson, o de las versiones televisivas del investigador Wallander. Música: El británico Nicholas Sillitoe es el autor de la banda sonora, una adecuada composición que mezcla sonidos orquestales con utilización de elementos electrónicos y que consigue subrayar con intensidad las escenas de acción, mientras que aporta esa cadencia casi industrial a la telaraña política que se teje en torno a la figura del primer ministro noruego.
Springfloden (2015-)
Cilla y Rolf Börjlind para SVT1
Otro thriller policíaco producido ahora desde Suecia, que de nuevo involucra a la protagonista (una joven aspirante a policía) en una historia personal que conecta el pasado con la investigación del presente. Al margen del argumento principal, en torno a un antiguo caso en el que una mujer latina apareció muerta, sepultada en una playa, que quedó sin resolver, la serie plantea algunas cuestiones paralelas que son interesantes, como la trama que acompaña a una serie de palizas que dos adolescentes de ideología extremista provocan a un grupo de mendigos. El racismo, cierto auge de las ideologías fascistas y la exclusión social que especialmente en los países escandinavos no les gusta desvelar en sus propias calles, se convierten así en temas tangenciales que dotan a la serie de un interés especial, al margen de que se trate de un entretenido y bien construido drama policial. Destaca especialmente el buen trabajo actoral, con una especial relación entre el veterano investigador defenestrado al que da vida Kjell Bergqvist y la estudiante de policía ingenua y curiosa que interpreta Julia Ragnarsson, a la que vimos también en la serie Bron/Broen (2011-). Los creadores de la serie, el matrimonio formado por Cilla y Rolf Börjlind, son dos instituciones en la televisión sueca, con éxitos consecutivos desde principios del 2000, especialmente en el género policíaco.
Música: La música está firmada por uno de los mejores compositores del panorama sueco, Johan Söderqvist, que ha creado las bandas sonoras de películas como Déjame entrar (2008) o Kon-Tiki (2012). Especialmente destacable es el pegadizo tema con el que se abre y se cierra cada capítulo, "No rest for me", interpretado por el cantante Jonathan Johansson, que se convirtió en todo un éxito de ventas en su país.1864 (2014)
Ole Bornedal para DR1
Otro récord de presupuesto, en este caso en la televisión danesa, es esta producción de corte histórico-bélico que se estrenó en la temporada de 2014. Se trata de una épica recreación de una de la mayores derrotas sufridas por el ejército danés cuando, en guerra contra Prusia y Austria, acabó perdiendo el 25% de su territorio. La serie, a pesar de contar con un presupuesto amplio, no se centra expresamente en el campo de batalla, sino que se interesa más por los entramados políticos que llevaron a Dinamarca a una guerra suicida, y por la supervivencia de los soldados en las trincheras, aunque cuando hace acto de presencia la batalla final, 1864 nos muestra sin miramientos la parte más sucia de la guerra, pero con una cierta mirada épica ante la derrota. También es cierto que hay cierto aire de folletín, y que la trama que se desarrolla en la actualidad no aporta gran cosa a la historia, más que trasladar ese espíritu de orgullo patrio a las nuevas generaciones. El responsable de la producción es Ole Bornedal, director de buenos policíacos como Nightwatch (1997) o de solventes muestras de cine de terror como The possession: El origen del mal (2012). Y aunque los espectadores estuvieron divididos entre quienes apreciaron los valores de la recreación histórica y quienes hubieran preferido una visión mucho menos maniquea de los acontecimientos, lo cierto es que se trata de una serie digna de mención para aquellos que gustan de los grandes dramas históricos.
Música: Para la banda sonora se apostó sobre seguro, con la firma del compositor norteamericano Marco Beltrami, que crea una de sus mejores obras de los últimos años. Una excelente muestra de romanticismo épico que subraya las escenas con temas de gran calado emocional y que sabe manejar con astucia las orquestaciones para dar un carácter de epopeya a los momentos más intensos.Kampen om Tungtvannet (Operación Telemark) (2015)
Mette M. Bølstad y Stephen Uhlander para NRK
Si la anterior producción danesa pasaba de refilón por las escenas de acción, esta miniserie noruega se plantea desde el primer minuto como una perfecta muestra de cine bélico que no deja pasar ni un solo momento de acción. Para muchos, se trata de la mejor producción de televisión que se ha hecho en Noruega, y ciertamente las cifras de espectadores demostraron que puede ser cierto. Con una media de 1200 millones de espectadores, el último episodio tuvo un share del 64%. ¿Cuáles son las razones del logro? Principalmente, un guión perfectamente estructurado que, aunque la trama se centra en un grupo de científicos que están creando un reactor nuclear para los alemanes, y su posterior sabotaje por parte de los aliados, maneja la información con claridad y juega bien con el suspense y la acción bélica. Esta serie podría formar junto a Band of brothers (2001) y The Pacific (2010) una perfecta trilogía de cine bélico grandioso hecho para televisión. Porque la producción también está cuidada hasta el mínimo detalle, y la tensión conforme avanzan los capítulos crece de forma exponencial. No es extraña por tanto la expectación que ha creado el estreno el próximo otoño de la nueva serie de sus responsables, Nobel (2016), centrada ahora en la guerra de Afganistán.
Música: Al tratarse de una coproducción con Inglaterra y Dinamarca, ésta aporta al compositor danés Kristian Eidnes Andersen, colaborador desde los inicios de Lars von Trier como diseñador de sonido. Aquí realiza un trabajo impecable, con una gran orquesta que aporta la épica de la acción de guerra y de los sabotajes preparados por los aliados, y que nos introduce desde los títulos iniciales en un preciso drama bélico.1864 se emite en Movistar +
Operación Telemark está editada en DVD por A Contracorriente Films