Para rendir al máximo sobre una bicicleta es necesario entrenar duro. El problema es que si nos pasamos con el entrenamiento y no dejamos a nuestro organismo que se recupere podemos caer en lo que se denomina sobreentrenamiento.
Las tres patas de la preparación de un ciclista son el entrenamiento, la nutrición y el descanso. Las tres tienen la misma importancia, y si falla alguna de ellas nuestro rendimiento no será el esperado.
Los períodos de descanso son fundamentales para que nuestro cuerpo asimile los entrenamientos que estamos realizando y vayamos mejorando y progresando. - piopialoCuando no descansamos lo suficiente y estamos sobreentrenados nuestro rendimiento se reduce notablemente.
Vamos a ver algunos de los síntomas que nos pueden hacer sospechar que hemos caído en el sobreentrenamiento.
Fatiga muscular y calambres
Uno de los síntomas que nos indican que nos estamos pasando son los calambres y la fatiga muscular. Cuando el organismo nos está avisando con estos síntomas lo más recomendable es parar y descansar hasta que volvamos a sentir bien nuestra musculatura.
Si tenemos la musculatura demasiado fatigada y hemos sufrido algún calambre y seguimos entrenando corremos el riesgo de sufrir una lesión que nos deje en el dique seco durante mucho tiempo.
Aumenta el apetito
Otro de los síntomas es que tenemos un hambre voraz. Esto es una respuesta fisiológica de nuestro propio organismo, que necesita una gran cantidad de nutrientes para recuperar nuestra musculatura.
Rendimiento más bajo del habitual en carreras o marchas
Si somos aficionados a realizar carreras o marchas cicloturistas y en alguna de ellas vemos que nuestro rendimiento es muy inferior al habitual podemos pensar también que estamos sobreentrenados.
Al tener los músculos fatigados en exceso no van a trabajar igual que si estuvieran a tope. Si nos ocurre esto durante una prueba ciclista lo mejor es continuar con un ritmo muy suave para no forzar en exceso la musculatura.
Mayor tiempo en la recuperación del pulso
Si notamos que cuando realizamos un esfuerzo nuestro pulso se recupera más lentamente que en condiciones normales también es un síntoma del sobreentrenamiento.
En estas situaciones notaremos una situación de fatiga más prolongada en el tiempo que cuando estamos en un nivel físico óptimo.
Dormir en exceso
Otro aviso que nos da nuestro organismo cuando nos hemos pasado entrenando es que dormimos más de lo habitual. Es otra respuesta fisiológica de nuestro organismo para intentar recuperarse lo antes posible de los esfuerzos.