Un mal día lo tiene cualquiera
Hay momentos en la vida en los que todo se ve realmente negro; parece que nos hundimos sin posibilidad alguna de que alguien nos rescate o de encontrar un flotador en medio de un océano revuelto en dónde las olas parecen Tsunamis interminables.
Al final todo se reduce a lo mismo, creemos que la felicidad radica en que ya no hay problemas. Esto no es cierto, pero sí lo es que todo dependerá de la forma en que percibamos los problemas o preocupaciones que podamos tener.
Ser agradecidos y enfocarnos en lo que tenemos y en los aspectos positivos de forma constante, es un muy buen hábito que al practicarlo incansablemente hace que sin darnos cuenta tengamos una actitud diferente ante las adversidades, lo que sin duda nos proporciona más felicidad.
Por eso, hoy te cuento...
5 Cosas que puedes hacer cuándo tienes un mal día
1-Con quejarte y preocuparte no cambias nada
Si crees en la ley de atracción, sabrás que mantenerte en una actitud negativa traerá más de lo mismo. Tampoco puedes mostrarte alegre sin no lo sientes, pero sí que puedes recordar y traer a tu memoria experiencias positivas y hacer cosas que te gusten para salir de ese estado más rápidamente.
2- Ríete aunque no sepas de qué
Esto es algo que vengo haciendo desde hace dos años. Cada vez que me acuerdo me río o sonrío, aunque no tenga motivo. Todo lo que una simple sonrisa activa en nuestro cuerpo y a nivel hormonal es tan benéfico, que hasta nos ayuda a sanar dolencias. Recuerda que para el inconsciente es lo mismo que te rías de un chiste a que te rías sin motivo. El efecto que produce es igual ¡Puedes engañarlo!
3- Practica la gratitud
Aunque en éste momento estés tan triste y deprimido te propongo que pruebes sentarte tranquilamente y comenzar a agradecer por cada cosa que tienes. Practicar la gratitud te conecta con el bienestar y eleva tu vibración, siempre sin excepción.
4- Cada herida, muestra que lo has intentado
Y sí, puede que te sientas mal o estés desanimado porque las cosas no han salido como esperabas; sin embargo y aunque no te sirva de consuelo ya sabes que todo es por algo, pero al margen de éste popular dicho que considero cierto te digo que ese dolor o angustia que sientes es el resultado de haber tomado el riesgo. Peor hubiera sido no intentarlo, ¿no crees?
5- Nada es para siempre
Lo sé, en éste momento de poco puede servirte que te digan que todo es temporal o que siempre que llovió paró, pero es la verdad. Mira hacia atrás y observa cuántas veces has atravesado situaciones difíciles en tu vida y seguro has salido, ánimo ¡esto también pasará!
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Post by Veronik A. García