Revista Cine
Si hay un sitio en México en el que debería exhibirse Fausto (Faust, Rusia, 2011) ese lugar se llama la Cineteca Nacional y su circuito cultural-alternativo. Si me pregunta en qué otro sitio podría verse el más reciente largometraje de Aleksandr Sokurov, me pondría usted en aprietos. No se me ocurre otro lugar más. De hecho, fuera del circuito festivalero y de los cine-clubs con vocación de cine de autor, no sé en qué otra parte podría verse esta extravagante, desbordada y grotesca relectura del mito de Fausto.Para bien y para mal, la programación de esta 53 Muestra Internacional de Cine ha sido consistente. Ha privilegiado el cine de autor más recalcitrante, más caprichoso, más personal, sea el de Arturo Ripstein, sea el de Aki Kaursmäki, sea el de, en este caso, el (dizque) heredero de Tarkovsky, Aleksandr Sokurov.
La crítica completa está publicada hoy en la sección cultural de Reforma.
Fausto se exhibe hoy en la Cineteca Nacional a las 11 y 17:30 horas.