Es posible encontrar claves para alcanzar el éxito y es algo muy bueno buscar consejos para progresar; sin embargo, algo que no te dirán es que una de las grandes razones que nos impide progresar en nuestra vida… ¡somos nosotros mismos! Puedes intentar buscar las soluciones afuera, pero si no te tomas el tiempo de buscar si tú mismo te pones bloqueos entonces te faltará mitad del camino.
Es momento de hacer introspectiva y descubrir los obstáculos que tenemos en nuestra mente para superarlos; así podremos hacer lo posible para actuar rápido y dejar de hacer las cosas que no nos dejan continuar.
1. Te enfocas en los objetivos y no en el proceso
Hay muchos que se concentran en lo que quieren obtener y no se preocupan para nada sobre cómo obtenerlo. “Quiero adelgazar 15 kilos” pero no haces ejercicio y no cambias tus hábitos alimenticios… entonces, ¿cómo lo lograrás?
La única manera de obtener todo lo que deseas es esforzándote en ello y preocupándote por hacer todo lo posible para conseguirlo. La próxima vez que quieras lograr un objetivo, traza el camino para alcanzarlo.
2. Le tienes miedo al fracaso
Henry Ford dijo alguna vez que el fracaso es la oportunidad de empezar de nuevo pero con más inteligencia; y exactamente eso es lo que todos deberíamos pensar sobre el fracaso. Ninguna persona exitosa se ha librado del fracaso y cualquiera de ellas te dirá que es necesario fracasar para poder lograr el éxito.
Fracasar es natural y no vas poder evitarlo pues en algún momento te sucederá, lo único que puedes hacer es prepararte mentalmente para ello y recibir el fracaso de la mejor manera: como una manera de aprender, de volverse más inteligente y de ganar experiencia de vida necesaria.
3. Te quedas esperando el momento perfecto
La vida es una sola y lo peor del caso es que pasa muy rápido. ¿De verdad deseas malgastar sus preciados segundos esperando eternamente el mejor momento? Ningún momento será absolutamente perfecto y si es por eso, entonces jamás podrás hacer nada. Organizarte y prepararte es bueno, pero obsesionarte por ser el mejor para obtener lo que deseas no lo es.
4. Basas tus decisiones en la opinión de los demás
Oír a tus seres queridos y personas de confianza pueden ayudarte a ver mejor las cosas pero jamás tomes una decisión basándote solamente en lo que ellos te dicen. Las personas que desean meterse en tu vida no vivirán ni tus éxitos ni tus fracasos; por lo tanto, a ellos no les afectará el que sigas su consejo pero a ti sí… algunas veces para bien pero muchas veces para mal.
Nadie conoce a dónde quieres llegar mejor que tú y por eso, tú debes tener siempre la última palabra.
5. Quieres correr antes de caminar
Todo en esta vida tiene un proceso e igual que un bebé, no puedes dar pasos grandes sin haber dado pasos pequeños. Llámalas “pequeñas conquistas” y alégrate cuando logres cada una de ellas pues te acercan con más rapidez y preparación a la meta.
Es entendible que quieras lograr todo de una vez pero si sigues los pasos correctos con esfuerzo, podrás lograr todo también. Es necesario tener calma y enfocarse en seguir adelante.7
6. Intentas lograr muchas cosas a la vez
Es muy difícil ocuparse de muchas cosas y a la vez prestarles el 100% de nuestra atención a cada una; por esa razón, es muy probable que alguna de esas cosas falle.
Si pones dos cosas a cocinar al mismo tiempo, posiblemente una de ellas se queme y así puede pasar con los proyectos que emprendas o las obligaciones que asumas. Concentra toda tu atención en una cosa y luego prosigue, es mejor hacer una cosa excelentemente a hacer 2 cosas de forma mediocre.
Mira esta lista de mitos que te encontrarás en el camino hacia el progreso; sin embargo, recuerda no prestarle mucha atención a lo que digan y enfocarte en seguir adelante superando los obstáculos que tú mismo te impones cada día.
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