666 Park Avenue: el terror descafeinado
6/10
A la espera de que finalice la primera temporada, y con la noticia de la cancelación de la serie para próximas entregas, 666 Park Avenue es más una historia de suspense que de terror. Digamos que está hecha para los que buscan un poco de miedo pero sin pasarlo mal.
La historia está centrada en un lujoso edificio situado en el número 999 de Park Avenue (no hay más que darle la vuelta para ver la referencia). Regido por un rico y ambicioso hombre de negocios y su esposa, en él también veremos la historia de otros inquilinos que, por propia voluntad o no viven en algunos de sus apartamentos.
La serie comienza con la llegada de Jane y Henry, una pareja joven con nombres poco originales pero buen currículum, que deciden hospedarse en el suntuoso edificio. Gavin Doran, el regente y dueño de este portentoso inmueble, le ofrece a Jane (que acaba de terminar sus estudios de arquitectura) el puesto de jefe de mantenimiento. La pareja, abrumada ante el espectacular apartamento que la empresa de Doran les ofrece y sus múltiples incentivos tales como vestidos, joyas y cenas lujosas, no tarda mucho en mudarse y festejar la suerte que creen haber tenido. Pero aunque jóvenes deberían saber que todo tiene su precio, y que comprarnos a los humanos con aquellas cosas que más deseamos es la opción más fácil que tiene el demonio para atraernos a su terreno. (Eso contando con que ese señor rojo y con tridente realmente exista).
Como no podía ser de otra manera, no pasa mucho tiempo hasta que "cosas raras" comienzan a suceder. Visiones que nadie ve salvo la protagonista; maletas que encierran un oscuro secreto; un sótano lúgubre lleno de fantasmas; una puerta secreta hacia otra dimensión... Sí, la serie cumple todos los tópicos, incluido el de la niña despeinada en mitad del pasillo sujetando una muñeca.
Pero a pesar de todo, incluso cuando en momentos de supuesta tensión uno no pueda más que reírse ante lo previsible de ciertas escenas (y eso que soy bastante miedica), esta serie tiene una historia que se vislumbra con un gran trasfondo y muy bien montada. Como dije al principio, el suspense lo tiene, y personajes que en apariencia no parecen más que simples complementos a la trama resultan ser finalmente ejes principales, sin los cuales la historia no puede seguir. Quien parecía no saber, sabe más que los demás, y quien parecía malo... bueno, es malo pero quizá no tanto.
Sobre aspectos técnicos tengo que decir que es bastante correcta. Contando con un casting nada despreciable, las actuaciones son siempre creíbles y muchas veces buenas, salvo la señora Doran -lo siento-. La dirección y todo el equipo también hacen su trabajo, que siempre es de agradecer.
Dicho todo esto, la verdad es que lamento que vayan a cancelar su emisión, sobre todo porque creo que el guionista realmente nos estaba guiando hacia una historia con entresijos y vueltas sorprendentes, pero la audiencia manda. También comprendo por otro lado a los espectadores, una serie que se autotitula 666 decepciona si luego te lleva al país de las maravillas.