7 beneficios de jugar con la máquina registradora

El juego simbólico o de imitación es un recurso educativo fundamental, que es utilizado estratégicamente por maestros y padres. Es la actividad de representar no únicamente historias, sino la realidad cotidiana mediante el juego, donde los peques asumen roles: curar a sus muñecos como médicos, ir de compras, cocinar, etc.

Dentro de este tipo de juegos, uno de los preferidos por los peques es el juego de compras. Recrear una tienda, convertirse en vendedor o comprador. Todo este universo puede resultar muy divertido para los más pequeños de la casa. Un elemento que siempre les llama la atención es la caja registradora. Así, esta máquina se convierte en un juguete imprescindible para sus juegos de compras ya que con ella pueden pasar los productos por el código de barras, contar monedas, pasar la tarjeta de crédito, ¡e incluso hablar por el micrófono!

Pero ¿qué supone poner una caja registradora de juguete en manos de los más pequeños? Los beneficios son muchos. Aquí anotamos siete que aporta este tipo de juguete de imitación:

1. Al incluir una caja registradora de juguete en los juegos de compras de los pequeños, contarán con más realismo en sus juegos de imitación. Imitar la realidad del mundo de los adultos les hace desarrollar su imaginación.
2. Estimulan y desarrollan el lenguaje hablado, gracias a la interacción con otros niños y con diferentes situaciones.
3. Con una caja registradora de juguete en sus manos, los peques podrán conocer el dinero. Aprenderán a familiarizarse con monedas y billetes al mismo tiempo que se divierten jugando.
4. Los juegos de compras con cajas registradoras de juguete son un buen método para enseñar y reforzar el cálculo matemático.
5. Los juegos de compras también implican socialización a través del juego compartido. Los peques tendrán que negociar el reparto de roles para el juego, quién manejará la caja registradora, quién será el cliente... Por tanto, las relaciones sociales se verán también fortalecidas.
6. Reforzar la motricidad fina es otro de los beneficios de jugar con una caja registradora. Manejar billetes y monedas, teclear en la calculadora, pasar el lector de códigos de barra... Todas estas acciones harán que los peques manipulen los objetos cada vez con mayor destreza.
7. Y descubrirán hábitos fundamentales como recoger juguetes, ordenar, limpiar,...

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